La confesión con la que María Casado rompió en lágrimas ante Pedro Ruiz
Presa de la impotencia, la periodista catalana desveló aquello que le preocupa y no pudo evitar emocionarse durante su entrevista con el veterano presentador en 'Las tres puertas'.
José Sacristán, Beatriz Luengo, Yotuel Romero, Raquel Sánchez Silva y Pedro Ruiz fueron los invitados en la nueva entrega de 'Las tres puertas', el programa de La 1 que está cosechando éxito de crítica, por la calidad de la puesta en escena y de las entrevistas, pero no así en audiencia, pues apenas pasa del medio millón de espectadores. Algo por lo que su conductora, María Casado, no puede evitar sentir cierta amargura e impotencia. Y así se lo reconoció entre lágrimas a Pedro Ruiz, que regresaba a TVE por primera vez en lustros tras una abrupta salida.
La confesión fue de lo más inesperada, así como la emoción de la periodista catalana, que se dejó llevar por la conversación cómplice que estableció con el veterano presentador. Éste recordó sus tiempos en 'Estudio estadio', cuando avionetas dejaban caer las cintas con resúmenes de los partidos a su paso por Prado del Rey, así como su paso por 'La noche abierta', el último programa que condujo en la cadena pública hace ya dos décadas.
Ruiz reconoció que le gustaría retomar aquel espacio de entrevistas, aunque ahora "debería ser mucho más divertido". Y sobre todo apostaría por el directo, como defensor de la televisión en vivo: "Se tiene que hablar con el riesgo de que pase cualquier cosa".
El veterano presentador, que ante todo se considera "artista", admitió su egolatría. Y en el intercambio de confidencias, Casado reconoció que andaba "regular de autoestima".
Un programa para desintoxicar y limpiar
Ruiz le preguntó entonces si estaba "inquieta o preocupada" con algo, y la periodista catalana que sí lo estaba "con esto, con este programa". Y no pudo añadir nada más porque rompió en lágrimas.
Ruiz tomó entonces la palabra y, tras pedirle que sonriera, trató de levantarle el ánimo. “Te he dicho más de una vez que es mucho más difícil desintoxicar que intoxicar y los medios ofrecen más dinero por ensuciar que por limpiar, lo cual es absolutamente imposible de tragar", explicó.
"Te ofrecen un montón de dinero por meterte en una isla o por una promoción, pero por limpiar les parece que es más fácil y no, señores, es mucho más difícil limpiar y este programa limpia", añadió. "Luego tendrá la audiencia que tenga, pero los números no son el alma de la vida”, zanjó.
Tras esta parrada, María Casado logró rehacerse y sin hacer más comentarios sobre su 'bajón' prosiguió la entrevista como si nada hubiera sucedido, sosegada y jovial. Aunque la tensión, quedó claro, va por dentro.