Julia Otero revela qué promesa tuvo que cumplir para entrevistar a Mario Conde
La periodista tenía que conseguir, antes de grabar el programa con el banquero, una entrevista con alguien del mundo de la política: y lo consiguió
Julia Otero es una de las periodistas más radiantes del panorama nacional y, con un toque “ochentero”, ha acudido este domingo a la llamada de Jordi Évole para grabar un “Lo de Julia”, un programa dedicado a su carrera y vida. Un espacio que ha resultado de lo más interesante para conocer muchas cuestiones ocultas de la periodista.
Tanto éxito ha tenido el formato, que el propio Évole ha decidido que la entrevista se emita en dos programas diferentes, tal y como ya hizo con Miguel Bosé. Y es que en esta primera entrega, Otero ha desvelado intimidades como la vez en la que uno de sus jefes le puso la mano en la pierna con intenciones sexuales y su brutal respuesta amenazándole con partirle la cara si no cesaba el acoso. O la recuperación que ha vivido del cáncer diagnosticado hace un año.
Pero una de las anécdotas que más han impresionado a la audiencia ha sido, sin duda, cuando ha desvelado qué promesa tuvo que cumplir para que Mario Conde acudiese a su programa “La luna” en los años 90. "Cuando vino a 'La luna' nadie sabía la voz que tenía, nunca había concedido una entrevista. Era Dios en el mundo de las finanzas. Acababa de hacerse con el poder en Banesto. Nadie fuera de los circuitos de la banca, ningún 'outsider', había conseguido ese lugar”, recalcaba la periodista.
El banquero pedía a la periodista que antes de su visita, consiguiese entrevistar a un personaje importante de la política española, ”un peso pesado en política". Conde no quería ir a un programa cualquiera donde solo hubiesen pasado cantantes y actores. Por eso, Otero logró que Alfonso Guerra aceptase una entrevista justo antes de Conde.
"¿Quería un peso pesado, ¿no? Viene el vicepresidente, la próxima semana, tú", respondió Otero al banquero, aunque ahora la periodista confiesa que no se siente especialmente orgullosa por aquella entrevista. "Me di cuenta de que él había conseguido la hora de televisión que quería. Quedó como Dios, como un hombre moderno que se sabía cuatro nombres de grupos de La Movida. Le regalamos una hora de televisión, lo que no sabíamos es que se la estábamos regalando a un tipo del que luego supimos todo lo que supimos".