Iker Jiménez cuenta en Cuatro el "aterrador" día en el que creyó que podía morir
El periodista relató a los espectadores de "Cuarto Milenio" un hecho que tuvo lugar hace años y que hizo que pasara una noche angustiosa en la que se topó con una situación de "terror".
Iker Jiménez quiso compartir en la última entrega de Cuarto Mileno un suceso que le ocurrió hace 25 años y el cual aún no ha podido olvidar. El presentador relató a los espectadores de Cuatro que se encontraba por la zona de la Sierra de Retín, en el término municipal de Barbate, cuando se topó con algo que le tuvo aterrado durante varias horas.
Para que los seguidores del programa pudieran conocer de cerca su historia, Iker quiso mostrarles imágenes del lugar. "Es una zona militar y hay un pequeño camino. Yo andaba por estos lugares y como casi siempre en aquella muy lejana había muchas historias de misterio. En esta zona del Retín y en sus inmediaciones había habido alguna aproximación de lo enigmático", comenzó diciendo el periodista.
Iker Jiménez explica qué le ocurrió
El presentador de Cuatro contó que le sucedió algo muy diferente. "Muchas veces me ocurría que llegaba a una fonda, a una venta, a una pensión, a una casa de huéspedes, en la orilla del camino, y llamaba y no había nadie. Eran tiempos, a veces, sin móvil. Yo llamaba por teléfono desde cabinas, desde bares", apuntó Iker.
A continuación, el periodista contó que mientras iba conduciendo por la carretera vio una mancha blanquecina en uno de los laterales. Se trataba de una venta. "Aparqué el coche, entré en la vieja venta y tuve la corazonada de que me tenía que ir de allí", dijo.
"Había dos tipos y el dueño de la venta, y era como si un forastero hubiera interrumpido su conversación. Pensé que me tenía que marchar, pero por otra parte la vergüenza hizo que no quisiera quedar mal delante de los señores. Algo en su mirada me inquietó", confesó. Al preguntar si tenían alojamiento para él, los dos hombres le dijeron que sí, pero que tenía que acompañarles.
"Ahí empezó una odisea que yo nunca he olvidado. Se montaron en un vehículo y yo iba detrás. Yo no sabía dónde me llevaban, la carretera cada vez era más estrecha y yo sin saber por qué seguía en medio de la noche a aquellos dos hombres", dijo Iker, asegurando que creía que aquello iba a acabar mal y que le iban a robar.
Cuando llegaron a una caseta el vehículo se detuvo y los dos hombres le dijeron que ahí era donde podía pasar la noche. Cuando ya se quedó solo, al rato vio una figura en el cuarto de baño y se asustó. "En un momento dado escuché unas voces, eran como unos susurros, como un hablar, como si fuera un diálogo de personas y me asomé al pasillo y al final vi a alguien como agazapado, como esperándome", relató el presentador de Cuatro.
"Tuve la sensación de que estaba esperándome y ahí sí que me entró el miedo, fui consciente de que estaba en compañía de gente", dijo, asegurando que se metió de nuevo en la habitación y puso algo delante de la puerta para que nadie pudiera entrar. "A día de hoy no sé si era mi imaginación, que es un enemigo muy potente, si eso era una sugestión, o realmente ahí estaban esperándome", concluyó, asegurando que pasó una auténtica "noche de terror".