Irma Soriano vuelve a "La Ruleta" y deja a todos con la boca abierta
El popular concurso de Antena 3 ha sorprendido este lunes a su audiencia con un programa lleno de anécdotas, donde ha habido cabida para acordarse de antiguos presentadores del espacio.
el popular concurso de sobremesa de Antena 3, continúa cosechando momentos. El de este lunes, además de tener nombre propio, pues una de las concursantes ha protagonizado dos grandes instantes, ha recuperado la figura de una mítica presentadora de este espacio de los años 90: Irma Soriano.
El espacio que presenta ahora Jorge Fernández no se ha llamado siempre como lo conocemos ahora. Antiguamente, entre 1990 y 1992 se conocía como La ruleta de la fortuna, una etapa en la que tuvo hasta 6 presentadores diferentes en tan corto espacio de tiempo, siendo Irma uno de ellos.
Una madrina famosa y un increíble bote final
Rocío, una de las concursantes "estrella" del concurso de Antena 3 está muy vinculada al programa desde hace bastante tiempo. Resulta que una de sus míticas presentadoras, Irma Soriano, es su madrina. Y es que, la participante madrileña no ha querido dejar pasar la oportunidad para hacer esta referencia familiar y que Jorge Fernández ha recibido con sorpresa.
Irma Soriano fue presentadora de este espacio entre 1990 y 1991, siendo la tercera presentadora en la historia del programa: "Estuvo aquí, al lado mío y es espectacular", apuntaba el actual presentador.
Pero no sería el único momento de esta concursante y ahijada de Soriano. La madrileña, que se ha confesado amante de las películas, llegó al panel final con más de 4.100 euros. Aparentemente, se enfrentaba a un panel fácil para ella, pues era un tema del que es conocedora: las películas. A la hora de presentarse, la concursante ha afirmado que es una gran fanática de estas y que por ello estudió producción y realización.
La casualidad hizo que el panel final fuese sobre su tema favorito. Sin embargo, Rocío ha fallado la pista "director y película" y no ha podido irse a casa con más de 12.000 euros en el bolsillo, pues si llega a averiguar el panel (El verano que vivimos de Carlos Sede), se hubiese llevado 8.000 euros.