'La isla bonita': Ester Expósito cambia el colegio por Ibiza
La protagonista de 'Élite' va a meterse en la piel de una joven que llega a la isla dispuesta a hacerse famosa. La serie pretende ser un reflejo de los problemas de la juventud actual.
Desde hace mucho tiempo, Ibiza es uno de los paraísos vacacionales por excelencia. La isla, rodeada por unas impresionantes aguas cristalinas, es frecuentada por algunas de las grandes fortunas mundiales y todo tipo de celebrities y personalidades, que en la mayoría de los casos cuentan con espectaculares casas que son la envidia del común de los mortales.
Y es precisamente esa afluencia de personas que llegan dispuestas a gastarse lo que sea necesario para pasárselo bien, y el tamaño de una isla que no puede crecer más y que tiene parte de su espacio protegido, por lo que Ibiza lleva un tiempo experimentando los problemas derivados de esta situación. ¿El principal? Los altos precios de las viviendas a los que se enfrentan los vecinos de la isla y los que cada verano acuden para trabajar allí.
A este problema es al que tienen que enfrentarse Alfonso, Peter y Sol. Son jóvenes, amigos y compañeros de piso. Sus personalidades no pueden ser más diferentes: Alfonso es un fiestero, Peter un idealista y Sol una ecologista comprometida. Sin embargo, hay algo que les une: su casero les ha subido el alquiler durante el verano, ellos se niegan a marcharse y tendrán que apañárselas para poder pagarlo. Es el argumento principal de La isla bonita, la nueva serie que va a protagonizar Ester Expósito, que va a meterse en la piel de Roxy, una joven que llega a la isla para codearse con los famosos y hacerse un hueco en el universo de las RRSS y los influencers.
Creada por Ginesta Guindal, la serie está basada en las vivencias de la propia cineasta durante el tiempo que estuvo en la isla. Tal y como ha explicado, con el problema de la vivienda como punta del iceberg, la dramedia -que de momento no está vinculada a ninguna plataforma- pretende ser un reflejo de la juventud actual y de sus problemas: la inestabilidad laboral, el colapso de los ecosistemas o la salud mental.