La pizza de la que renegaría cualquier italiano se atraganta a Karlos Arguiñano
El cocinero vasco ha ofrecido una opción económica, a la par que rica, de un "manjar" que gusta a todos y que se puede hacer en familia, aunque a muchos no les haga gracia.
El cocinero más famoso de Antena 3 sigue regalando cada medio día sus mejores recetas, y trucos, para poder disfrutar en familia. Karlos Arguiñano, en su último programa, ha ofrecido una receta de un plato clásico y tradicional italiano que ha conquistado los paladares de quienes vieron Cocina abierta de Karlos Arguiñano, pero que ha hecho que la cuota de pantalla baje con respecto a otras emisiones. Así, este miércoles, con una media de 934.000 espectadores, el share se situaba en un 17%, levemente inferior al día anterior.
El vasco se "atrevió" con una receta de pizza que pondría los pelos de punta a cualquier italiano purista, ya que le dio un toque diferente incluyendo unos ingredientes que igual no le encaja a muchos: patatas y huevo frito. "¿Qué os parece la historia?", señalaba Arguiñano, mientras emplataba una porción de pizza a la que le incluía ese "manjar".
Karlos Arguiñano y su receta de pizza low cost
De la tortilla de patata convertida en pizza, llega la pizza con huevo frito y patatas. La cabeza de Karlos Arguiñano no para de idear y en su último programa de Antena 3 ha traído una receta con ingredientes que tenemos por casa y en la que pueden participar hasta los más pequeños. "Intercalando así, de una forma caserita", comienza a decir mientras va echando tiras de jamón cocido sobre la base. "Esto lo pueden hacer los niños en casa y luego, se lo comen todo", matiza.
Pero además de dar una receta sencilla y "rica, rica", el cocinero vasco ha aprovechado su espacio de Cocina Abierta de Karlos Arguiñano para lanzar un mensaje que a quienes se dedican a este sector gastronómico no le hará ninguna gracias: "No hace falta llamarle a nadie que os traiga pizza. La hacéis en casa y quedáis como señores, así de claro. Y lo he hecho en casa es el doble de rica y a mitad de precio", apostillaba Arguiñano.