La polémica persigue a Netflix por el caso de Rosa Peral y la Guardia Urbana
'El cuerpo en llamas' y 'Las cintas de Rosa Peral' no están dejando indiferente a nadie, ni siquiera a la propia protagonista a la que se le ha abierto expediente por su participación.
Una imagen de archivo de Rosa Peral.
El caso de Pedro Rodriguez, Rosa Peral y Albert Rodríguez llenó horas de televisión en 2017, acaparó titulares y despertó todo tipo de hipótesis. 7 años después el que se denominó el crimen de la Guardia Urbana ha vuelto a la palestra de la actualidad informativa. El motivo son dos títulos que desde hace unas semanas están disponibles en el catálogo de Netflix: El cuerpo en llamas y Las cintas de Rosa Peral.
La serie protagonizada por Úrsula Corberó y Quim Gutiérrez que recrea el asesinato de Pedro Rodríguez a manos de su pareja y de la amante de esta, se ha convertido en todo un éxito. Se estrenó hace tan solo 9 días, a pesar de que Rosa Peral intentó paralizar su emisión y reclamó a Netflix más de 400.000 euros en concepto de derechos de imagen. Y desde entonces no ha estado exenta de polémica, al igual que el documental en el que la policía ha concedido su primera entrevista desde prisión.
Sin llamadas desde la cárcel
Las primeras críticas llegaron por parte de algunas de las personas que han intervenido en Las cintas de Rosa Peral. Periodistas como Toni Muñoz, autor del libro sobre el caso Solo tú me tendrás, y Mayka Navarro, o Félix Martín, fiscal del crimen de la Guardia Urbana, han asegurado sentirse engañados ante el enfoque que finalmente se le ha dado al documental. Algo que el propio director, Carles Vidal, ha terminado reconociendo.
Ahora, acabamos de conocer que la Conselleria de Justicia, Derechos y Memoria de la Generalitat de Cataluña ha abierto un expediente a Rosa Peral por haber concedido entrevistas desde la cárcel, tanto para la producción del documental de Netflix como para una intervención en Catalunya Ràdio que se emitirá hoy mismo. Ante esto, y para evitar otros posibles "malos usos del régimen de comunicación" por parte de Peral, las llamadas de la prensa han sido restringidas.