Bronca entre Joaquín Prat y Patricia Pardo fuerza a Telecinco a tomar medidas

Joaquín Prat no se esconde. Se expresa con claridad y en algunas ocasiones de forma contundente y de manera coloquial. Tampoco huye de expresar sus opiniones. Él es la salsa de Vamos a Ver, el programa de Telecinco heredero de El Programa de Ana Rosa.

Copresentando el espacio está su compañera Patricia Pardo y, en algunas ocasiones, ambos han chocado y han expresado sus discrepancias en directo. Es lo que tiene también hacer un programa con tantas horas en directo, de 10:30 de la mañana a las 15 horas.

Algunas broncas entre ambos han sido muy comentadas, pero la ocurrida este lunes 17 de junio tiene pinta de ser la más grave entre ambos. Y eso que se trataba de un tema menor, casi de risa.

Resulta que el matinal de Mediaset España abordaba una curiosa noticia. Tal y como les contábamos en ESdiario, Este sábado 15 de junio Telecinco le daba una segunda oportunidad a La vida sin filtros con el estreno de su segunda temporada, algo que ya habían anunciado desde hace semanas.

En su día, el anuncio de Telecinco de apostar por una segunda temporada de La vida sin filtros llamó mucho la atención, especialmente después de los malos resultados que obtuvo el programa en su primera andadura en la cadena.

Y el tema que más ha llamado la atención de los propuestos por Tárrega era el de la peculiar historia de Merivione, una mujer brasileña casada con un muñeco de trapo y con tres hijos (también de trapo). Pese a lo llamativo del asunto, el estreno de esta temporada no logró mantener a la audiencia de Telecinco pegada a la pantalla.

Calificativos como "surrealista", "incómodo", "bodrio" o incluso "bazofia" son los que muchos espectadores utilizaron en redes sociales para definir a la primera entrega de la segunda temporada de "La vida sin filtros".

Joaquín Prat y Patricia Pardo, el gran lío

Y Vamos a Ver entrevistaba a esta brasileña casada con un muñeco. En una conexión el directo Prat hablaba con ella para que explicase su vida. Meriviones presentaba a los espectadores a su rara familia de trapo y el presentador la trataba con mucha ternura. La entrevista terminaba con Joaquín Prat preguntando a la mujer si era feliz. Tras su respuesta afirmativa el presentador la despedía con una sonrisa y los mejores deseos.

Pero el buen rollo se acababa de sopetón cuando intervenía Pardo que protestaba enérgicamente sobre la entrevista. “¡No te enfades Patricia”, le suplicaba Prat… Pero nada detenía la ira de ella que se justificaba diciendo que a una mujer hoy en día le cuesta mucho tener, cuidar y mantener a unos hijos como para que su invitada frivolizase con un asunto familiar serio.

“¡Ni un minuto de televisión para esta gente, no!”, decía Patricia Pardo en una clarísima crítica a la dirección del programa que Prat trataba de ‘amortiguar’: “¡Hombre, con tanto cabrón que hay por ahí suelto!”.

Era el momento en el que la dirección del programa zanjaba el asunto dando orden al presentador (a través del pinganillo) de que debía dar paso a un bloque de publicidad, pero ellos seguían discutiendo hasta que le llegaba otra orden que Prat contó en directo a los espectadores.

“Ah, ¿que nos vamos a negro? No, no, damos paso a publicidad”. Y es que irse a negro es lo peor que puede ocurrir en televisión, que viene siendo que te corten de forma tan abrupta que los espectadores vean por unas milésimas la pantalla sin nada en emisión.

No sabremos si habrá regañina a Patricia Pardo por cuestionar los contenidos de su propio programa.