La doble de Shakira pide cenar con Piqué y acaba sentada con Alfredo Landa

Una vez más, First Dates no ha atinado con la media naranja que las citas esperan. Ya le pasó hace unos meses a una soltera que buscaba tener un encuentro de ensueño con Chayanne y acabó sentada a la mesa con Jesús Gil, en sentido figurado, claro. En esta ocasión, ha ocurrido algo similar. Ana, una comercial de Tenerife que está convencida de que se parece a Shakira, acudió al programa de citas de Cuatro a buscar a un hombre que se pareciese a Gerard Piqué: "Nos parecemos en la forma de bailar, en la fisionomía de la cara, en los rasgos, en el pelo…", comentó la tinerfeña a Carlos Sobera. 

Que esta soltera tuviese un prototipo similar al del exfutbolista culé no era para nada chocante, ya que, tal y como ella misma confesó, todos sus exnovios se daban un cierto aire al también empresario: "Me gusta que sean atléticos, que tengan los ojos claros y que sean divertidos", explicó al presentador del dating show, a la vez que reconocía que le gustan los hombres muy atractivos. Antes de que conociera a su cita, el programa propuso a Ana que bailase como Shakira. 

Ana se queda a cuadros cuando ve a su cita

Y así hizo, para acto seguido conocer a Lorenzo, un maquinista naval que para nada se parecía a Piqué. Y es que el físico de este canario se alejaba por completo del prototipo de Ana y se acercaba más al de Alfredo Landa. Algo que esta comercial no pudo ocultar cuando vio a su cita, pues se quedó a cuadros. Sin embargo, y aunque no le gustó físicamente Lorenzo, trató de darle una oportunidad: "No puedes rechazar a una persona por un físico", afirmó la tinerfeña. Pero quien no pudo disimular fue Sobera, que rompió a reír a carcajadas al ver a esta particular pareja: "Qué sentido del humor tenemos", declaró el presentador, tratando de poner fin a su ataque de risa.

Lorenzo puso todo el empeño que pudo durante la cena para conquistar a Ana, pero sus técnicas de ligar no fueron efectivas. El maquinista naval no dejó de hablar sobre su trabajo y Ana se cansó de que toda la conversación girase en torno a barcos: "Mientras que yo le hacía preguntas sobre la pareja y el amor, él lo relacionaba todo con su vida laboral", criticó la soltera ante las cámaras de Cuatro. Una cita que no llegó a mejorar en ningún momento, por la falta de conexión, por lo menos por la parte de la comercial: "Me hubiera gustado cenar con un chico que me hubiese gustado, como Piqué o Ryan Gosling". Sin embargo, a Lorenzo le encantó Ana, tanto que reveló que estaba dispuesto a comprar los anillos: "Yo ya estoy medio enamorado de Ana", declaró el soltero. Cuando llegó el momento de la decisión final, Lorenzo intentó tener una segunda cita con la canaria, pero Ana le respondió con unas calabazas.