Cerrar

Mediaset: Risto Mejide, cerca del banquillo de los acusados por un grave delito

La Audiencia Provincial de Madrid cambia de criterio y envía la causa contra el publicista directamente al Tribunal Supremo

Risto Mejide, en Todo es Mentira.

Publicado por

Creado:

Actualizado:

En plena recuperación de la pandemia del Covid-19 y con la campaña de vacunas a pleno rendimiento, Risto Mejide iniciaba una dura cruzada contra los antivacunas, que eligieron libremente su opción de no ponerse la vacuna del coronavirus.

El publicista y comunicador emprendía una cruzada contra ellos en su programa de Cuatro, Todo es Mentira. Una empresa en la que también se ocupaba el humorista Miguel Lago. Contra ellos la Asociación Libertum interpuso una denuncia por lo que entendían “delito de odio”, causa que la Justicia cerraba,

Pero ahora ha dado un giro el caso. La denuncia contra el presentador de Mediaset España llegará al Tribunal Supremo, según ha informado este martes 30 de julio el medio The Objective. 

Risto Mejide, Anabel Alonso y Miguel Lago

La Audiencia Provincial de Madrid ha cambiado de criterio y admite que las partes puedan presentar un recurso de casación ante el Supremo, para lo que les ha dado un plazo de 15 días. El Alto Tribunal revisará el fallo de la titular del Juzgado de Instrucción número 27 de Madrid, María Ángeles Velázquez, quien ordenó sentar en el banquillo de los acusados a Risto Mejide y el humorista.

En noviembre de 2022, Risto Mejide, Miguel Lago y Anabel Alonso fueron denunciados por la Asociación Liberum y por el abogado José Luis Mazón por cometer, supuestamente, un presunto delito de odio contra quienes se negaron a vacunarse en tiempos de pandemia. "Son medidas que prácticamente convierten a los no vacunados en apestados, cosa que a mí me parece bien", dijo el catalán. Y añadió: "Si decides no vacunarte, allá tú. Todo el mundo es respetable, pero no todas las ideas son respetables ni merecen un respeto".

Tal y como recuerda el citado portal, en un principio, las diligencias habían sido sobreseídas, pero la magistrada María Ángeles Velázquez reabrió el caso en base a la "reiteración de una conducta que por su gravedad, reiteración o entidad discursiva pudiera provocar, directa o indirectamente, sentimientos de odio", tal y como se pudo conocer este mes de enero.

Tanto Risto Mejide como Miguel Lago recurrieron a la apelación ante la Audiencia Provincial de Madrid. La pena por esta clase de delitos es de uno a cuatro años de prisión. Las multa, de 6 a 12 meses.