TELEVISIÓN
La confesión de José Yélamo a Eva Soriano sobre su pasado en "España Directo"
El presentador de La Sexta recuerda alguna de las anécdotas que le ocurrieron mientras trabajaba en el mítico programa de TVE.
Onda Cero escogió a dos rostros muy populares de la televisión nacional para desarrollar la tercera entrega de "Operación Salida", el podcast de Ponle Freno. Según recoge en su propia web, la emisora de Planeta, "este verano, Eva Soriano y José Yélamo coinciden en sus destinos de vacaciones: un tiempo en Galicia y otro en Cádiz. Para Eva, que se confiesa una “golosa de paradas”, los viajes se hacen largos por su afición a conocer sitios de carretera donde se come bien. José prefiere madrugar mucho para no pasarse ocho horas escuchando los Cantajuegos en bucle. En este trayecto juntos en coche, Eva y José recuerdan sus traumas con ciertos animales y algunos momentos en los que pasaron fatiguita: de los riesgos del reporterismo al peligro de quedarse dormida en una colchoneta de playa".
A medida que avanza el verano se van publicando fragmentos de esta conversación que mantienen el presentador de LaSexta Xplica y la conductora de Cuerpos especiales en Europa FM. En el último clip que ha aparecido, Yélamo comparte con Eva Soriano algunas de las anécdotas que protagonizó cuando el ahora presenta de LaSexta era un reportero más del mítico programa de Televisión Española España Directo.
José Yélamo cuenta, por ejemplo, cómo intentaba sacar, siempre que podía, sacar beneficio de su acento andaluz de Cádiz, aunque en alguna ocasión no acabó de funcionarle del todo. Recuerda Yélamo cuando acudieron a realizar un reportaje en un poblado chabolista situado en algún lugar indeterminado de Galicia.
No era, a priori, el mejor lugar para trabajar y, de primeras, Yélamo decidió tirar de acento para lograr, como así consiguió, que un joven aceptara ser entrevistado para el video que posteriormente se emitiría en España Directo. Sin embargo, ese éxito del encuentro con el joven no fue igual que el conseguido con la madre, que amenazó, cuchillo en mano, al reportero y al cámara con el que iba. Ahí no valía ya ni acento ni nada y ambos tuvieron que salir de allí prácticamente a la fuga.
"Además, como en las películas, nos montamos en el coche, el coche no arrancaba y la señora estaba detrás estaba dando golpetazos en el cristal y al tuvimos tuvimos que salir por patas de alli", recordaba Yélamo en el podcast.