13 rutas distintas para disfrutar del vino
Los aficionados al vino conocen bien el placer que puede proporcionar, pero las experiencias que se pueden vivir en torno a él van mucho más allá de lo que cabe en una copa
El enoturismo está de moda. En los últimos años, el vino se ha convertido en la excusa perfecta para conocer, ya no los viñedos en donde nace, o las bodegas en donde se elabora, sino todos los tesoros (culturales, gastronómicos, paisajísticos…) que esconden las principales zonas de producción de España. Muchas Denominaciones de Origen ofrecen experiencias memorables que se recogen en las 34 Rutas del Vino de España (wineroutesofspain.com). Coincidiendo con el Día Mundial del Enoturismo, que se ha celebrado el 14 de noviembre, repasamos 13 de las menos conocidas, con algunas de las actividades más originales y atractivas que proponen.
ARRIBES (Castilla y León)
Esta ruta se ubica entre las provincias de Salamanca y Zamora, colindando ya con Portugal. Lo más llamativo de su paisaje es que alberga 180 km de cañones fluviales que jalonan el río Duero, que se pueden recorrer en un crucero que ofrece unas vistas espectaculares. Por supuesto, las 9 bodegas de la zona pueden ser visitadas, pero quien busque, además, emociones fuertes, tendrá la posibilidad de atravesar cascadas a pie, hacer una ruta en kayak, o practicar escalada. Para los amantes de la gastronomía, el mayor atractivo puede ser una cata maridada con los platos típicos de la zona; desde los pescados de río, a las patatas machacadas o los asados. Y quienes quieran un viaje cultural, tendrán la oportunidad de observar pinturas rupestres o visitar talleres de artesanos locales. Toda la información sobre estas y otras actividades en www.rutadelvinoarribes.com
UTIEL REQUENA (Comunidad Valenciana)
Visitar esta zona, en el corazón de la Comunidad Valenciana, es adentrarse en “Territorio Bobal” (la variedad de uva predominante en la D.O.), una zona con más de 2.500 años de tradición vinícola. De hecho, aquí, concretamente en el yacimiento íbero de La Solana de las Pinillas, se encuentran los restos de la bodega más antigua de la península ibérica. Los 50 establecimientos que conforman esta ruta del vino ofrecen, por supuesto, actividades relacionadas con el vino: catas, visitas a viñedos, bodegas y museos, menús gastronómicos maridados… pero también otras experiencias menos previsibles, como un hacer recorrido por una galería subterránea medieval, practicar rafting en las hoces del río Cabriel o jugar a un “escape-room” en un caserío bodega del año 1.900. No hay que dejar de probar los platos y productos típicos de la zona, como los embutidos, los bollos de longanizas y magras y los dulces típicos. Más información en www.rutavino.com
CALATAYUD (Aragón)
La comarca de Calatayud, a la que los romanos llamaron Bílbilis Augusta, es tierra de vinos desde la época de los celtíberos y posee una impresionante riqueza cultural, comenzando por su Mudéjar, que fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Es el destino ideal para quienes busquen escapar del estrés, con balnearios de aguas minero-medicinales, que ofrecen además tratamientos con vinoterapia, museos, parques naturales, o un campo de golf de 18 hoyos. A la hora de comer, hay que probar sus fantásticas verduras, entre las que destaca la borraja, el célebre ternasco, o sus dulces con chocolate (esta zona fue el primer lugar de Europa en donde se elaboró chocolate por primera vez), como las famosas “Frutas de Aragón”. Más actividades en www.rutadelvinocalatayud.com
MADRID (Comunidad de Madrid)
Poca gente sabe que, a principios del siglo XX, había más viñas en Madrid que en La Rioja, y que en esta comunidad se produce vino desde la época de los romanos. La Denominación de Origen Vinos de Madrid, con 4 subzonas diferenciadas, sorprende a los aficionados al vino por su variedad y su calidad, pero, además, ofrece un sinfín de actividades inesperadas: pasear a caballo entre viñas, pisar uva a la antigua usanza, observar búhos reales, cernícalos o águilas Harris mientras recorremos un viñedo, o catar los vinos de la tierra mientras observamos las estrellas con un telescopio. Por supuesto, todo esto, a tiro de piedra de la capital de España, con toda la oferta gastronómica, cultural y de entretenimiento que ello comporta. Más posibilidades en www.madridenoturismo.org
Nuestro país ofrece rutas muy originales y tan variadas como lo son nuestros vinosNuestro país ofrece rutas muy originales y tan variadas como lo son nuestros vinos
NAVARRA (Comunidad Foral de Navarra)
Aunque la garnacha es la variedad de uva más utilizada en su D.O., la ruta del vino de Navarra ofrece, no sólo grandes rosados y tintos, sino también blancos y moscateles de gran calidad, que acompañan perfectamente a la gastronomía de la zona. Es imposible pasar por aquí sin dejarse tentar por sus verduras (alcachofas, pimientos, espárragos…), sus carnes y embutidos, o sus platos con trufa. Las actividades que nos proponen son inabarcables, comenzando, lógicamente, por las visitas a bodegas y viñedos, pero destaca la riqueza de su patrimonio natural, por lo que un plan más que apetecible puede ser recorrer el Parque Natural de las Bardenas Reales, declarada también Reserva de la Biosfera, o cualquiera de los parajes que alberga la zona, ya sea a pie, en bicicleta, en 4 x 4 o, incluso, en carreta.
Otras opciones en www.rutadelvinodenavarra.com
JUMILLA (Región de Murcia)
La Ruta del Vino de Jumilla se ubica en la confluencia de la Región de Murcia y la provincia de Albacete. De hecho, su gastronomía, uno de los mayores atractivos de la zona, es una mezcla de influencias murcianas, manchegas y levantinas, lo que permite disfrutar en un mismo lugar de unos auténticos gazpachos manchegos, un arroz con conejo y caracoles o un queso de cabra frito. En cuanto a las actividades que proponen, una de las que más éxito tiene entre los turistas son sus noches especiales en las que la música en vivo puede disfrutarse entre barricas. Conviene planificar el viaje y hacerlo coincidir con alguna de las fiestas religiosas y populares que se celebran en distintas épocas del año. Más propuestas en www.rutadelvinojumilla.com
GRAN CANARIA (Islas Canarias)
Esta ruta del vino da la oportunidad al visitante de comprobar que esta isla, un auténtico continente en miniatura, ofrece mucho más que sol y playa. Es, además, la única ruta del fuera del territorio peninsular, pero su verdadera singularidad está en la riqueza y complejidad de sus vinos, fruto de un territorio único y de variedades de uva, como la malvasía o la listán blanca. Sus mayores bazas residen en sus bodegas enclavadas en paisajes protegidos, y en su gastronomía, rica en productos locales (frutas, quesos, carne de cochino negro) y platos como las “papas arrugás” con mojo, o el conejo en salmorejo. Por supuesto que sus enormes playas y sus menos conocidos paisajes de interior son visita inexcusable para completar la experiencia. Para planificar una escapada: www.rutadelvinodegrancanaria.com
RIBERA DEL GUADIANA (Extremadura)
La Ruta del Vino y Cava del Guadiana se extiende por una vasta extensión de terreno, que comprende 6 subzonas de producción, lo que da como resultado una gran variedad de vinos: tintos, rosados, blancos, espumosos y cavas. Además de las 28 bodegas, que ofrecen visitas y catas comentadas, merece la pena reservar unas horas para recorrer el Museo de las Ciencias del Vino, situado en Almendralejo (Ciudad Internacional del Vino). Para complementar la experiencia, podemos elegir entre una ruta en burro, una relajante tarde de spa con tratamientos a base de vino o una cata de chocolate. Todo ello sin olvidar degustar los maravillosos quesos de la zona (de Ibores, de la Serena, torta del Casar…), o las carnes, de ternera y cordero, protegidas por IGP. Todos los detalles en www.rutadelvinoriberadelguadiana.com
Los aficionados al vino conocen bien el placer qe puede proporcionar un buen caldo, pero las experiencias que tenemos la posibilidad de vivir en torno a él van mucho más allá de lo que cabe en una copa
MARCO DE JEREZ (Andalucía)
Los vinos de Jerez, y la Manzanilla, son uno de los mayores tesoros del patrimonio enológico mundial, con unos métodos de producción únicos (sistema de criaderas y soleras) que, a partir fundamentalmente de 3 variedades de uva (Palomino, Moscatel y Pedro Ximénez), obtienen unos vinos absolutamente singulares y distintos entre sí: Fino, Manzanilla, Amontillado, Oloroso, Medium, Pale Cream, Cream, Pedro Ximénez y Moscatel. La Ruta del Vino y del Brandy (destilado de vinos de la zona) del Marco de Jerez ofrece, además de una gran variedad de experiencias, no solo puramente enológicas, sino que combinan el vino con otros aspectos culturales y patrimoniales. Por citar sólo algunas: un recorrido por varios tabancos para degustar vinos y tapas, que culmina con una actuación de flamenco en un tablao, una visita al Parque Nacional de Doñana con un paseo en barco por el Guadalquivir y una cata en Sanlúcar, o una visita a la Real Escuela Andaluza de Arte Ecuestre. Mucho más en www.rutadeljerezybrandy.es
RÍAS BAIXAS (Galicia)
Es la única Ruta del Vino de Galicia, pero, a cambio, ofrece un centenar de propuestas enoturísiticas, que se desarrollan en distintas zonas de las provincias de Pontevedra y A Coruña. Sus más de 50 bodegas visitables, los alojamientos con encanto y los restaurantes seleccionados, conforman una oferta irresistible para los amantes de la buena mesa, que disfrutarán especialmente con los magníficos mariscos y pescados de la zona. Además, planes para sacar todo el partido a sus costas, como submarinismo, vela, o pesca deportiva, y a sus zonas de interior, con rutas a caballo, senderismo o tratamientos de talasoterapia.
Para saber más: www.rutadelvinoriasbaixas.com
LLEIDA (Cataluña)
En La Ruta del Vino de Lleida participan casi 70 empresas que procuran que los visitantes disfruten de unas experiencias únicas. La base de esa oferta la conforman, evidentemente, sus 35 bodegas y sus vinos, muy distintos entre sí, debido a las grandes diferencias de sus viñedos, plantados desde los 200 a los 1.000 metros de altura, en plenos Pirineos. Precisamente, el paisaje es otro de sus puntos fuertes para tentar al enoturista que se siente atraído por la naturaleza y el patrimonio, con castillos, monasterios y pueblos con encanto. Además, deportes de aventura, o actividades más relajadas, como la observación de aves, el senderismo o disfrutar de su maravillosa gastronomía. Muchas más opciones en: www.rutadelvidelleida.cat
MANCHUELA (Castilla La Mancha)
Los ríos Júcar y Cabriel marcan y enmarcan la Ruta del Vino de Manchuela, un pequeño terruño perteneciente a Castilla La Mancha, pero con enormes particularidades enológicas y geográficas. Uno de sus mayores atractivos es el sistema de castillos, palacios y arquitectura defensiva, a lo que hay que añadir experiencias originales, como una visita a un cultivo de champiñones en Villanueva de la Jara, o un paseo en coche de caballos entre viñedos. Por supuesto, sin olvidarse de disfrutar de sus vinos para acompañar productos típicos de la zona, como sus quesos, el cordero manchego, la miel de la Alcarria, o el ajo con el que se elaboran platos como el “ajo mataero” o el “ajipán”. Para rebajar calorías, nada mejor que un paseo por cualquiera de los pueblos de la zona, o una ruta en bici.
Más información en: www.rutadelvinolamanchuela.com
RIOJA ALTA
Es la zona vitivinícola por excelencia de La Rioja (existen también las rutas del vino de la Rioja Alavesa, y la de la Rioja Oriental). Aquí se desarrolló especialmente la cultura del vino de la región y se encuentran algunas de las bodegas más prestigiosas de la D.O. pero, sobre todo, es un auténtico paraíso para los amantes del vino: cosecheros, crianzas, reservas, rosados, claros y blancos, de pequeños o grandes productores que se pueden conocer al tiempo que se entra en contacto con las gentes que los elaboran. El paisaje y la gastronomía terminan de redondear una oferta capaz de satisfacer al aficionado más exigente, con propuestas como un paseo en globo sobre los viñedos, un picnic a pie de viña, o una “vincana” (una especie de gymkana alrededor del mundo del vino). Muchas más ideas en: www.rutasdelvinorioja.com