Raviolis de setas y espinacas con salsa de tomate casera
Tener en tu despensa siempre listo una salsa de tomate casera te puede salvar con nota de sobresaliente una fabulosa comida o cena
Qué son los raviolis
El ravioli es un tipo de pasta italiana en forma cuadrada que se rellena con diferentes ingredientes para ofrecerte distintos sabores. Los rellenos mas comunes son:
- setas con cebolla y queso
- ricota con espinacas
- espinacas, queso de cabra y piñones tostados
- calabaza y queso
- carne y tomate
- calabacín y queso de cabra
Por supuesto, siempre puedes innovar y divertirte soñando rellenos para seleccionar tus favoritos y adecuarlos a tu gusto y al de tu familia.
Hoy en día los raviolis también los podemos comprar listos para hervir en agua y tenemos una gran variedad para elegir. Aunque si decides hacerlos desde cero comprobarás que es bastante fácil. He hecho raviolis cientos de veces, por lo que toma buena nota de los pasos y no habrá errores.
Lo primero, preparar la masa con harina, agua, huevo y sal.
Cómo hacer la masa para raviolis
Los únicos ingredientes que vas a necesitar son:
300 gramos de harina
2 huevos
1 yema de huevo
agua caliente
¼ cucharadita de sal
Coloca la harina en la mesa de trabajo, añade la sal, los huevos y comienza a amasar hasta integrar todos los ingredientes completamente. Según vayas amasando si está demasiado seca vierte un poco de agua tibia para ablandarla y convertirla en una masa más elástica. En el caso de que la masa se vuelva pegajosa añade harina. Has de amasar durante varios minutos hasta conseguir una masa suave y lisa.
Una vez la tengas haz una bola con ella, déjala reposar 30 minutos y después estira con ayuda de un rodillo.
Cómo hacer un relleno de espinacas y setas para raviolis
El relleno de los raviolis siempre tiene que ser cremoso y suave, así que, decidas el que decidas, asegúrate de que tenga una consistencia de paté.
Para hacer este relleno de espinacas y setas, calienta una fina capa de aceite de oliva en una sartén y pocha suavemente una cebolla laminada. Cuando esté ablandada incorpora 200 gramos de setas variadas cortadas en pequeños dados. Salpimienta al gusto y sigue cocinando hasta que estén muy tiernas. En el último minuto añade una taza de espinacas baby troceadas y revuelve.
Pasa el resultado a un procesador de alimentos y tritura con tres golpes secos para conseguir la consistencia de paté. Vuelca a un recipiente, añade 75 gramos de requesón, mezcla para integrar y deja enfriar antes de rellenar.
Cómo rellenar los raviolis. Trucos y consejos
Una vez que la masa haya reposado haz cuatro porciones con ella. Espolvorea sémola de trigo sobre la mesa de trabajo para evitar que la masa se pegue. Con un rodillo extiende una de ellas dejando un grosor de un milímetro aproximadamente y recorta los bordes para conseguir un rectángulo recto.
Con ayuda de un dispensador de helado pequeño o una cucharilla, recoge relleno y colócalo sobre la masa dejando una separación de 3 centímetros aproximadamente entre ellos.
Con un cepillo humedecido en agua repasa los bordes y parte del contorno del relleno para asegurar una mejor adherencia. Pon la otra plancha de masa encima de tal manera que los bordes cuadren y deja caer sobre ella una lluvia de sémola de trigo.
Con mucha suavidad presiona suavemente con los dedos entre un ravioli y otro para dejar escapar el aire, de esta manera evitarás que se abran durante la cocción.
Luego, con una rueda de pastelería dentada córtalos en cuadrados, disponlos en una fuente enharinada con sémola y ya tendrás listos tus raviolis.
Receta rápida de raviolis con salsa de tomate casera
Ingredientes para 4 personas
500 g raviolis rellenos
350 g salsa de tomate casera
2 bolas de mozzarella fresca
2 cdas queso parmesano en polbo
¼ taza mozzarella rallada
Elaboración
Sumerge los raviolis que acabas de preparar en abundante agua hirviendo durante 5 minutos o hasta observar que suben hinchados a la superficie. Ponlos unos minutos en un colador para que suelten el agua.
En una fuente de horno extiende una generosa capa de salsa de tomate, coloca una capa de raviolis y desmiga mozzarella fresca por encima.
De nuevo una capa de salsa de tomate, otra de raviolis, otra de mozzarella fresca y así hasta completar la fuente.
Cubre toda la superficie con queso parmesano, queso mozzarella rallado e introduce la fuente en el horno precalentado a 180º durante 10-12 minutos.
Ahora sí, ¡a la mesa!