Estos son los trucos para hacer la mejor salsa de tomate casera

Qué sería de la gastronomía española y de la de muchos lugares del mundo sin una buena salsa de tomate casera. El acompañante por excelencia en recetas con pasta, arroz, verduras, huevos e incluso guisos o estofados.

Una buena salsa de tomate casera tiene la virtud de engrandecer, colorear y aportar jugosidad a todos los platos de manera increíble. No solo porque hacerla en casa te garantiza un sabor natural, único y auténtico, mil veces mejor a cualquiera que puedas comprar en los supermercados, sino que también, es muchísimo más económica, saludable y nutritiva.

Cómo hacer una salsa de tomate casera y que todos se pierdan por ella

Hacer una buena salsa de tomate no precisa de grandes conocimientos culinarios. Tan solo es necesario la elección de unos buenos tomates rojos que han de estar maduros, un par de cebollas, tres o cuatro dientes de ajo y el pasar lento de las manillas de un reloj, para conseguir la perfección de esta salsa reconocida en el mundo entero.

Pero si también quieres que tu salsa de tomate tenga un color rojo intenso para que los niños no vean su arroz o espaguetis con un tono pálido, prueba a añadir un pimiento morrón rojo grande a la fritada. Aportará un sabroso y ligero toque dulzón a la salsa, lo que va a evitar que tengas que añadirle azúcar para equilibrar la acidez y, además, va intensificar su color rojo.

Qué tomates debo comprar

Existen más de 10.000 variedades de tomates en el mundo: grandes, pequeños, rojos, verdes, amarillos, dulces, ácidos, más o menos carnosos… y aunque parezca mentira todos tienen su lugar en la cocina.

Los más adecuados para hacer salsa son la variedad de tomate pera, la variedad de rama y los divertidos tomates cherry. Todos ellos son dulces con un punto ligero de acidez, están cubiertos de una piel fina, son carnosos, y lo mejor de todo, extremadamente sabrosos.

Así que, no hagas pereza para hacer tu propia salsa de tomate casera, que podrás conservar al vacío y disfrutar en cualquier momento siempre que quieras.

Receta de salsa de tomate casera 

2 kilos de tomates

2 cebollas

4dientes de ajo

1 pimiento morrón rojo

sal

pimienta

aceite de oliva

Elaboración:

1.- Cubre la base de una sartén grande con una capa de aceite de oliva y cocina durante 3-4 minutos la cebolla y los ajos cortados en láminas. Después añade el pimiento rojo y deja que se fría todo junto durante 10-12 minutos más.

3.- Lava los tomates, córtalos y vuélcalos en la sartén. Añade sal, un poco de pimienta y cocina durante 45-50 minutos revolviendo ocasionalmente.

En este proceso observarás que los tomates se desprenden de su agua, por lo que es mejor que subas la intensidad del fuego para acelerar su evaporación.

Los tomates estarán listos cuando veas que los líquidos quedan por debajo de la carne de los tomates.

4.- Pasa el resultado por un pasa puré o colador chino, asegurando una buena extracción para conseguir una salsa densa y con cuerpo. Antes de que enfríe consérvala en botes de cristal esterilizados y disfrútala siempre que quieras.

Una vez tengas almacenada en tu despensa esta sabrosa salsa de tomate casera podrás preparar platos tan deliciosos como estos:

• Pasta con albóndigas y salsa de tomate
• Raviolis de setas y espinacas con salsa de tomate
• Conchas con crema de tomate y ternera
• Sepia guisada con tomate
• Empanada gallega con salsa de tomate casera
• Pez limón a la cordobesa
• Fideos a la cazuela