Isabel Coixet se enfada por una broma y arma la monumental en los Goya
La Academia del Cine quiere que la gala de este sábado sea pacífica, incluso Dani Rovira ha avisado de que la política ocupará el espacio justo. Pero un vídeo promocional ha roto la paz.
La Academia de Cine quiere que la gala de los Goya de este año se celebre sin incidentes y más cuando una amplia representación del espectro político del país cruzará la tradicional alfombra verde este sábado. A pesar de los intentos por no avivar la polémica, las redes sociales difundieron el desencuentro entre la directora Isabel Coixet y los responsables de marketing del evento a cuenta de uno de los vídeos de promoción.
Coixet expresó su "indignación" por la utilización de su imagen sin permiso y consideró que se metieron con ella "de una forma gratuita y fea". El vídeo en cuestión recogía el momento en el que la cineasta se quedó en blanco en el escenario tras recibir su premio por Mi vida sin mí en 2003 y el cómico Dani Rovira calificaba el suceso como "ridículo".
"Nadie me pidió permiso y me pareció indigno. No soy una actriz ni cómica. Muchas personas tenemos alergia a lo social. Fobia social, vamos. En una conversación puedo ser coherente, pero cuando tengo que hablar en público me sudan las manos, me bloqueo. Le pasa a mucha gente. Calificar mi comportamiento de ridículo me pareció fatal", fueron las declaraciones al Periódico de Cataluña con las que comenzó el desencuentro público.
Al ver el anuncio la directora se puso en contacto con el actual presidente de la Academia, Antonio Resines, para que lo retiraran de la circulación. Así lo hicieron, los encargados de la difusión del evento quitaron el anuncio de su web, de los cines y de Televisión Española donde sí se mantuvieron los otros dos spots. En uno de ellos, es el propio Resines quien se mofa de su desafortunado rap en la gala de 2004.
La cineasta, que opta este año a nueve estatuillas por su última película Nadie quiere la noche, exigió lo que a ella le parece justo tras este desaire. "Estaría bien que me pidieran disculpas. Pero aquí nadie pide perdón", expresó. La catalana ya cuenta en su haber con cinco "cabezones" y podría aumentar su palmarés personal en las categorías de Mejor Dirección y Mejor Película.