El Samsung Galaxy Fit a 75€, el negocio del año en los rastreadores de fitness.
Ahorra 30 euros y obtén un seguimiento automático del entrenamiento, control del ritmo cardíaco y más.
Hay que elegir un rastreador de ejercicio en lugar de un reloj inteligente con funciones de rastreo de ejercicio. Lo primero y más importante: el precio. De hecho, por un tiempo limitado, y mientras duren las existencias, Amazon tiene una vez más una de las mejores ofertas de rastreo de fitness que puedo recordar: El Samsung Galaxy Fit por 75,79€. en el modelo blanco con un precio regular de unos 100€.
El Galaxy Fit ofrece un conjunto sorprendentemente robusto de características comparado con los rastreadores de fitness "económicos" del pasado. Por un lado, incluye la monitorización del ritmo cardíaco... e incluso puede notificarte si detecta un latido irregular. También detecta automáticamente la actividad y comienza a registrarla. Incluso detecta el tipo de actividad: caminar, correr, andar en bicicleta, etc.
Haremos un inciso aquí para apuntar que el reloj de Apple puede hacer lo mismo... pero no es así. A menudo toma de 5 a 10 minutos antes de que reciba la notificación de "parece que estás haciendo tal y tal", y si olvidamos terminar la actividad manualmente cuando finaliza, los resultados son totalmente sesgados.
Buscamos un testimonio de primera mano sobre el rendimiento del Galaxy Fit, Scott Stein de CNET lo probó. En su comparación de Galaxy Fit con Fitbit Inspire HR, señaló lo siguiente: "También me gusta el rastreo automático de caminatas y entrenamientos de los aparatos de gimnasia de Samsung, y cómo las estadísticas aparecen instantáneamente en la pantalla. En una caminata rápida, de repente estoy en el modo de seguimiento del entrenamiento sin hacer nada".
Hablando del Inspire HR (actualmente a unos 95€, en caso de que estés comparando), es bastante similar al Galaxy Fit, pero con una diferencia clave: este último tiene una pantalla AMOLED a color.
Esa pantalla está en el lado pequeño, por supuesto, lo que puede hacer que las notificaciones y otros textos sean difíciles de leer mientras se hace ejercicio. La duración de la batería es de hasta cinco días, aunque se espera menos si se configura el ajuste para hacer un seguimiento frecuente del ritmo cardíaco.
Creo que los beneficios aquí superan con creces algunos pequeños aspectos negativos. Por 75 euros, obtendrán una pulsera de actividad física muy solvente, que entre otras cosas, le recordará que debe dejar de hacer ejercicio. ¡Más barato que un bypass!
¿No os tienta probarlo?