Boom Overture: El futuro es supersónico

Un vuelo directo en avión comercial de Madrid a Boston puede tener una duración aproximada de 7 horas 20 min, por un coste por billete de ida y vuelta (también aproximado) de unos 3 500 euros. Con al menos una escala, es un viaje que podría tener una duración de casi 13 horas.

Blake Scholl, propietario de Boom Technology promete que, con sus aviones de velocidad supersónica (mach 2.2) podrá ofrecer ese trayecto en solo la mitad del tiempo: 3.3 horas, al mismo precio.

Es una consideración conservadora si tomamos en cuenta que mach 2.2 es un poco más de dos veces la velocidad del sonido, que es de 1 234 km/h.

Boom Technology ya ha recibido inversión de capital por más de 85 millones de euros y tiene una orden de diez aviones del gigante Virgin y veinte de Japan Airline, sin tener todavía construido el primer avión.

Overture será el primer avión supersónico con potencial comercial tras la desaparición del Concorde hace ya 20 años. Planea unir más de 500 rutas por todo el planeta, recortando casi a la mitad los tiempos de viaje actuales.

Blake Scholl es un ingeniero informático estadounidense que, tras trabajar en Amazon y Groupon, decidió crear su propia empresa aeroespacial.

Pero... ¿de verdad puede el Overture triunfar donde fracasó el Concorde?

Muchos creen que el Concorde dejó de volar por este terrible accidente del año 2000 que le costó la vida a 109 personas, pero lo que en realidad llevó al cierre del proyecto fue su ineficiencia económica. La tecnología de los años 70 's no era lo suficientemente buena para crear un modelo de negocio de masas en base a aviones supersónicos.

Sólo se llegaron a producir 14 Concordes que entraron en servicio, por lo que no había posibilidad de escalar el negocio económicamente

El mantenimiento era altísimo, sólo en combustible gastaba más de 25 000 litros/hora lo que supone más de 75 000 para viajar de Londres a Nueva York, la única ruta comercialmente viable. Además, este avión tenía prohibido sobrevolar sobre territorio habitado en los Estados Unidos por la terrible contaminación acústica que producía.

Con pasajes carísimos y escasos, sólo al alcance de los más ricos del mundo, y tras el accidente del año 2000 junto a los atentados del 11-S, los aviones comenzaron a viajar casi vacíos.

Con esta experiencia es normal que nadie se haya atrevido a recoger el relevo de British y Air France, hasta que Blake Scholl se puso a hacer números y vió que sólo necesitaba ser un 30 % más eficiente que el Concorde para convertir en viable un avión supersónico.

El Overture tendrá fuselaje a base de fibra de carbono, un material que aligera muchísimo la estructura y permite mejorar también la línea aerodinámica sin sacrificar casi espacio, además incorpora nuevos motores mucho menos ruidosos que los del Concorde (fabricados por General Electric), que permitirán aterrizar en la mayoría de aeropuertos del mundo y aún más allá, Boom asegura que este avión volará sin huella de carbono gracias a la tecnología de Prometheus Fuels que hará que el CO2 emitido por los motores provenga de capturar el CO2 del aire y transformarlo en propelente líquido mediante procesos eléctricos limpios.

En conjunto, el Overture sería un 75 % más eficiente económicamente que el Concorde, lo que permitirá bajar los precios por asiento sensiblemente

Boom parece que hará realidad los sueños de Blake Scholl, sin embargo tendremos que esperar hasta el 2029, cuando la empresa planea disponer de los permisos de vuelo y toda la infraestructura a punto para que nos podamos subir a uno de estos.