Ginés Marín inaugura San Isidro con una oreja a ley

Comenzó la feria de San Isidro con un sabor distinto. No, la de Vistalegre no es la plaza de Las Ventas. La Chata con las limitaciones de la pandemia no luce lo mismo. Pero muy al contrario, no será servidor quien le quite mérito a la Casa Matilla por tirar p'alante, por dar la cara, por organizar una mini feria en honor del santo patrón de Madrid y por abrir, si no la catedral del toreo, al menos sí la capilla de Carabanchel.

Chapeau por Toño y Jorge Matilla a quienes, eso sí, les sugerimos mejoren algunos aspectos de la organización empresarial. Más sutil imposible, Toño.

A la empresa le corresponde incorporar al espectáculo la mejor presentación posible acorde con la categoría de la plaza. Y de los seis de El Pilar, salvo el primero, el resto superó con creces su obligación. Y es al ganadero al que le compete mantener la casta, difícil mejunge éste lo reconozco, pero que en el caso de los Fraile de El Pilar, se les está yendo de las manos.

Todos en el mismo son. Distraídos, bonachones, con embestidas mecánicas cual robots de la factoría Telson, sosos, sin transmisión, así llegaban a la muleta, y con la insana intención de querer hacer presa cuando menos se lo esperaban los de luces. ¿Malas intenciones? No, pero con complicadas embestidas, midiendo, cerniéndose, buscando a la chita callando, sí.

Toros sin emoción, toreros faltos de ambición

López Simón ni tuvo, ni vio toro en el primero del que recibió una voltereta que a fin de cuentas le valió saludar una ovación. Voltereta semejante que también sufrió en el cuarto, tras cuya faena también saludó. A base de volteretas no se hace el buen toreo que le hemos visto otras tardes. Era una oportunidad en una temporada especial, que le debía haber valido para más.

La polémica llegó en el quinto, luego de que Alvaro Lorenzo aprovechara lo poco que tenía el parado, -pegado al piso le dicen ahora-, segundo del festejo. Polémica tras cortar una oreja con petición suficiente, pero de dudosa justificación, que el palco pudo haber negado a poco que su deseo hubiera sido el de dejar claro desde los comienzos, que Vistalegre no es la Plaza de Las Ventas, de acuerdo, pero sí que es Madrid.

Mala colocación de la cuadrilla de Marín. La buena lidia no depende de la plaza.

Los méritos de Lorenzo fueron las ganas, la técnica basada en los toques y la paciencia que tuvo con el que iba y venía sin más. Oreja excesiva para una faena voluntariosa que se hizo larga, como así lo evidenció el aviso escuchado.

Lo mejor de la tarde: Ginés Marín

Lo mejor de la tarde lo realizó Sergio Marín. Con el capote se gustó en ambos. A la verónica y por chicuelinas, con remates con el reverso del capote que gustaron en los tendidos. Marín demostró ambición de principio a fin. Con el no tan fácil tercero, que llegó a ponerle el pitón en la cara, la faena de muleta terminó en silencio.

Sería en el sexto donde llegaría el premio de un apéndice, éste sí cortado a ley, pues si con el capote, como queda dicho, se gustó variado y firme, fue con la muleta donde se vino arriba la tarde. Variado, con la ambición por bandera Ginés lo intentó hasta conseguir meter en el canasto las pocas virtudes, más bien ninguna, del que cerraba plaza. Premio a la meritoria labor de quien vino a Vistalegre sabiendo que a pocos kilómetros se encuentra la catedral del toreo que ayer protagonizó.

Reseña 1ª Feria de San Isidro

Toros de El Pilar, bien presentados, salvo el primero que bajó por hechuras y cara.

López Simón, Ovación con aludos y Ovación saludos.

Alvaro Lorenzo, Silencio y Oreja y,

Sergio Marín, Silencio y Oreja

Lo mejor y lo peor

Lo mejor: El toreo de capa de Sergio Marín, la pata "alante", ganando terreno, cimbreando la cintura y llevando al toro más allá de la raya del tercio.

Lo peor: El mal juego de los toros de El Pilar, cuyo deslucido comportamiento solo es comparable al de quien incumplió su compromiso profesional poniendo en evidencia el buen trabajo de la Casa Matilla, que debería tomar medidas.

El (mal) detalle

La megafonía, con el cuarto toro en el ruedo, informando de no se sabe bien qué, pues tampoco se le entendía. El Palacio de Vistalegre confunde la liturgia de los Toros con el espectáculo del baloncesto, el tenis o las cenas de empresa. Muy mal.

Cartel de hoy

2ª de la Feria de San Isidro.

Toros de Juan Pedro Domeq para Enrique Ponce, Morante de la Puebla y Pablo Aguado.

La Tauromaquia es cultura

Con el nombre de quien promovió la construcción del Palacio Vistalegre, se inaugura esta mañana la sala cultural Arturo Beltrán, que del 14 al 23 de mayo va a celebrar las siguientes actividades:

Viernes 14 de mayo. Inauguración de la Sala Arturo Beltrán y de la exposicion de

pintura y escultura de Mariano Cobo.

Sábado 15 de mayo. Mesa redonda: Historia de Vista Alegre con José Luis Lozano y los

escritores Carlos Abella y Domingo Delgado de la Cámara. Se inaugurará la exposición

fotográfica `La Chata vista por Cuevas y Botán´.

Domingo 16 de mayo. Homenaje a Curro Vázquez. Conversación del maestro con

Rubén Amón. Se inaugurará una exposición monográfica dedicada al maestro de

Cuevas y Botán.

Viernes 21 de mayo. Acto de la Unión de Criadores de Toros de Lidia. El nuevo

paradigma del campo bravo tras la Covid-19 con los ganaderos Antonio Bañuelos,

presidente de la UCTL, Ricardo del Río y Álvaro Martínez Conradi.

Sábado 22 de mayo. Recuerdo a José Cubero Yiyo con Juan Cubero, Julián Maestro y el

escrito Alfonso Santiago.

Domingo 23 de mayo. Tertulia con los triunfadores de la feria (ganadero, matador y

novillero).