Cargar el coche en 20 minutos, clave en el futuro del vehículo eléctrico
Una investigación demuestra que dar una segunda vida a las baterías usadas de vehículos eléctricos y reducir el tiempo de carga, marcan el futuro del mercado automovilístico.
Así lo aseguran desde el Instituto Tecnológico de la Energía (ITE), centro adherido a la Red de Institutos Tecnológicos de la Comunitat Valenciana (Redit), que ha desarrollado el proyecto Promet para investigar las causas de la degradación de las baterías de litio de los vehículos eléctricos y plantear opciones que alarguen su vida útil reduciendo el riesgo de fallo.
El coordinador del proyecto Promet y miembro de la unidad de Baterías del ITE, Juan Gilabert, asegura que “el envejecimiento, la temperatura exterior, las diferentes velocidades de carga y descarga, los periodos de reposo o el llamado ‘calendar aging’, que implica solo al paso del tiempo, son factores de degradación que afectan a las baterías de coches eléctricos”.
El coordinador de Promet, proyecto financiado por el Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (Ivace) a través de fondos Feder, ha asegurado que la innovación en materia de baterías para coches eléctricos se ha centrado en los últimos años en la búsqueda de nuevos materiales y en el desarrollo de algoritmos para la gestión de las baterías.
Se trata de un asunto importante y urgente, ha considerado Gilabert, puesto que incluso existen objetivos de la Unión Europea en este sentido que marcan el reto de “conseguir una recarga completa en un coche eléctrico en 20 minutos sin menguar la salud de la batería”.
“También ha empezado a hablarse mucho de segundas vidas, de investigar a qué otros usos puede destinarse la batería de un coche cuando ya no es útil para el vehículo”, ha añadido el miembro de la unidad de Baterías del ITE, que ha explicado que “las baterías solo son útiles y seguras para un coche hasta un nivel de densidad energética del 70 u 80%”.
En este sentido, el ITE también ha desarrollado proyectos para buscar materiales de última generación con los que mejorar los diferentes elementos de las baterías, especialmente los cátodos, y reducir la proporción de cobalto, un material al que solo se puede acceder de forma muy limitada.
Además, la unidad de Baterías del instituto tecnológico también se ha centrado en los llamados algoritmos de BMS, de gestión de baterías, que pueden utilizar los modelos matemáticos de Promet para que el vehículo sea capaz de reconocer cuándo es el mejor momento para hace una carga rápida y cuándo no lo es.