Bruselas propone reducir las emisiones de CO2
La Comisión Europea adoptó este miércoles una propuesta de primer marco voluntario a escala de la UE para certificar de forma fiable las eliminaciones de CO2 de alta calidad.
El Parlamento Europeo y el Consejo Europeo examinarán la propuesta del Ejecutivo comunitario, que contará con un grupo de expertos para desarrollar metodologías de certificación adaptadas para los diferentes tipos de actividades de eliminación de CO2. La primera reunión de ese grupo está prevista para el primer trimestre de 2023.
La propuesta impulsará las tecnologías innovadoras de eliminación de CO2 y las soluciones sostenibles de captura de dióxido de carbono en suelos agrícolas, y contribuirá a los objetivos de la UE en materia de clima, medioambiente y contaminación cero.
El reglamento propuesto mejorará la capacidad de la UE para cuantificar, supervisar y verificar las eliminaciones de CO2. Una mayor transparencia garantizará la confianza de las partes interesadas y de la industria y evitará el blanqueo ecológico.
Las eliminaciones de CO2 pueden y deben aportar beneficios claros para el clima y la Comisión dará prioridad a las actividades de eliminación de carbono que aportarán beneficios significativos para la biodiversidad.
Para garantizar la transparencia y la credibilidad del proceso de certificación, la propuesta establece normas para la verificación independiente de las eliminaciones de CO2, así como normas para reconocer los regímenes de certificación que pueden utilizarse para demostrar el cumplimiento del marco de la UE.
Para garantizar la calidad y comparabilidad de las eliminaciones de CO2, la propuesta de Reglamento establece cuatro criterios de calidad: cuantificación, adicionalidad, almacenamiento a largo plazo y sostenibilidad.
Esta propuesta es esencial para el objetivo de la UE de convertirse en el primer continente climáticamente neutro del mundo de aquí a 2050. Para alcanzarlo, la UE debe reducir al mínimo sus emisiones de gases de efecto invernadero y tendrá que aumentar la eliminación de CO2 de la atmósfera para equilibrar las emisiones que no pueden eliminarse.
Envases reciclables en 2030
En consonancia con esta medida, la Comisión Europea también pretender aplicar nuevas normas sobre envases de productos para toda la UE, de manera que todos ellos sean reciclables en 2030, y así prevenir que se generen residuos.
El objetivo fundamental del Ejecutivo comunitario es hacer frente a los envases como fuente cada vez mayor de residuos. Cada europeo genera casi 180 kilos de residuos de envases al año.
Además, los envases están entre los principales usuarios de materiales vírgenes, ya que un 40% de los plásticos y el 50% del papel que se utilizan en la UE se destina a ellos. Si no se adoptaran medidas, los residuos de envases en general aumentarían otro 19% de aquí a 2030 y un 46% en el caso de los de envases de plástico.
La Comisión Europea pretende reducir los residuos de envases en un 15% por persona y Estado miembro de la UE hasta 2040 en comparación con las cifras de 2018. Para fomentar la reutilización o el rellenado de envases, las empresas tendrán que ofrecer a los consumidores un determinado porcentaje de sus productos en envases reutilizables o rellenables.
Para evitar el envasado innecesario, se prohibirán determinadas formas de envases, tales como los de un solo uso para los alimentos y bebidas consumidos en restaurantes y cafés, los de un solo uso para frutas y hortalizas, las botellas miniatura de champú y otros envases miniatura en los hoteles.