Bodega Otazu reafirma su compromiso sostenible con sus dos nuevos proyectos
Bodega Otazu es el viñedo más al norte de España. Se encuentra ubicada a tan sólo ocho kilómetros de Pamplona y está enmarcada entre la Sierra del Perdón y la Sierra del Sarbil.
Bodega Otazu, el viñedo con D.O.P. Pago más al norte de España, afianza su compromiso con la sostenibilidad con el proyecto BIODIVERSIDAD, que está llevando a cabo con la Fundación Global Nature, con el fin de incrementar su implicación en la gestión sostenible, rentable y con un impacto positivo en la naturaleza. Con esta iniciativa, Bodega Otazu estudia el valor natural del viñedo, analiza en qué punto se encuentra y qué aspectos son mejorables para que siga aumentando su biodiversidad y sostenibilidad.
Asimismo, ha puesto en marcha el proyecto UNDERVINE, en colaboración con la UPNA (Universidad Pública de Navarra), a través del cual estudia el impacto de las distintas cubiertas vegetales debajo de las cepas. De esta forma se compara el trabajo del suelo mediante el laboreo frente al uso de cubiertas vegetales, tanto espontáneas como sembradas. A la siembra habitual de festuca, avena, cebada y mostaza blanca, se ha añadido la de trébol, alfalfa, veza, rábano o mostaza abyssine.
Todos sus vinos están elaborados exclusivamente con las uvas procedentes de las 116 hectáreas de viñedo propio que rodean la Bodega: Tempranillo, Cabernet Sauvignon, Merlot, Cabernet Franc, Chardonnay y Berués. Un viñedo certificado como Denominación de Origen Protegida Pago, la máxima categoría que puede obtenerse en España, conseguida gracias a la peculiaridad del clima y del suelo que define el viñedo de Bodega Otazu y la personalidad inimitable de todos sus vinos.
Con este proyecto, Bodega Otazu profundiza en la sostenibilidad de la gestión del suelo, buscando distintas soluciones que ayuden a aumentar su resistencia, incrementando la biodiversidad, mejorando la nutrición y la actividad microbiana y reforzando la estructura de la tierra, con lo que se minimizan los problemas de compactación.
En este sentido, se están analizando los costes de cultivo, el comportamiento agronómico y composición de la uva, las implicaciones sobre el estado hídrico, la presencia de especies invasoras en la línea del cultivo y se completará con un estudio sobre la biodiversidad del agrosistema.
Por último, Bodega Otazu avanza en el proyecto LIVIÑG SOIL, que comenzó en enero de 2022 y que prevé finalizar en diciembre de 2023. Se trata de una iniciativa en la que trabaja de la mano de la UPNA, como organismo de investigación, junto al INTIA (Instituto Navarro de Tecnologías Infraestructuras Agroalimentarias) y otras tres bodegas.