Baqueira Beret seguiría abriendo aunque no nevara un solo copo
La estación de esquí del Valle de Arán tiene uno de los mejores sistemas de innivación de Europa, con casi el 60% de su dominio esquiable con producción de nieve de la mejor calidad.
En medio de un escenario de alerta extrema por sequia en distintas partes de España que nos recuerda el delicado equilibrio ambiental en el que nos movemos por nuestra posición geográfica, los amantes de los deportes de invierno tienen una preocupación añadida por lo que afecta a las precipitaciones en forma de nieve, que cada vez son más impredecibles y escasas. Esta circunstancia no es algo nuevo y las estaciones de esquí llevan años preparándose para combatir esta carencia con una tecnología de innivación en la que España es un referente.
Estamos asistiendo a un invierno muy duro para los destinos de nieve del Pirineo, pero entre la desolación reinante, Baqueira Beret, la estación ubicada en el Valle de Arán, ha sabido aprovechar las dos nevadas del año para ofrecer a sus clientes más de 100km de pistas de manera sostenida desde que abrieron a principios de diciembre. Más allá de la benevolencia con que les ha tratado la climatología, su sistema de producción de nieve ha sido clave para conseguirlo, pues produce un oro blanco que sale de sus 770 "cañones de nieve" y que en 10 días podría conseguir 80 kilómetros de pistas perfectamente esquiables aunque no cayera un sólo copo del cielo.
Para ello sólo necesitan que la temperatura baje de los 2 grados positivos, ya que gracias a la gestión de la humedad relativa pueden fabricar nieve hasta esa cota, aunque lo ideal es moverse entre menos 4 y menos 8. La nieve que producen puede ser de distintas calidades que ellos calibran del 1 al 10, y como apunta Xavi Ubeira, Director Comercial de Baqueira Beret, su mejor nieve tiene más calidad que ciertos tipos de nieve natural. El proceso normal es hacer nieve de base de baja calidad, con más cantidad de agua y que hiela mucho para hacer "cama", y luego reforzar lo que va nevando con una nieve polvo ideal para la práctica del esquí.
La tecnología de producción de nieve de Baqueira Beret ha mejorado exponencialmente desde que tras el fatídico año 1989, en el que no pudieron abrir sus instalaciones hasta febrero por falta de nieve, se decidió invertir anualmente de manera sostenida para reducir la dependencia climática. Los innivadores, esas "jirafas metálicas" que jalonan las pistas, utilizan hoy 15 veces menos agua que hace 20 años, y la estación cuenta con 3 lagos capaces de almacenar 750.000m3 de agua que llenan cada año con el deshielo y las lluvias de primavera y otoño para ser autosuficientes.
Pensemos además que el uso del agua es circular, se recoge y se devuelve a las montañas. Eso sí, esto implica un gasto anual de 2 millones de kilowatios de energía, que para que nos hagamos una idea, debido al aumento del precio de la electricidad supuso 1 millón de euros más de coste el año pasado. La instalación de sistemas renovables es algo encima de la mesa para conseguir hacer el proceso más eficiente, pero entraña muchas complicaciones e impactos que no los recomiendan por el momento.
El sistema de producción de nieve está totalmente automatizado y se controla por fibra óptica. Para alimentar los cañones de agua y aire hay una red de más de 70km de tuberías enterradas en todos los sectores de la estación. El planteamiento actual permite conectar los 4 sectores esquiables de Baqueira Beret de punta a punta, y anualmente se hace un estudio de las zonas a ampliar según las tendencias de nevadas y el tránsito de los esquiadores. Las ventanas de frío para fabricar nieve son cada vez más cortas, y por ello cuentan con sondas y anemómetros repartidos por todo el "dominio" para desperdiciar lo mínimo posible, siendo el viento otro de sus grandes enemigos.
La coordinación con el departamento de máquinas pisa nieve es igual de importante, y les trasladan información precisa de lo que ocurre con la nieve producida. La superficie innivada de todo el Pirineo español es inferior al 1% del manto blanco que anualmente llega a nuestra cadena montañosa fronteriza, y además está en estudio las aplicaciones del sistema para combatir incendios llegado el caso, por mucho que sea un fenómeno poco habitual en alta montaña.
A pesar de los últimos días de temperaturas inusualmente altas, Baqueira Beret arranca con más de 100 km de pistas en previsión de apertura para el fin de semana del 3 y 4 de febrero y unos espesores entre 75 y 105 cm de nieve dura-primavera, condiciones ideales para celebrar la 43 edición de la Marcha Beret. Esquiar y disfrutar del que sin duda es uno de los mejores servicios de restauración en pistas del mundo con sus 24 establecimientos repartidos por todas las áreas es un plan imbatible para estos meses de invierno.