Seduce tu paladar con la exquisita tarta Pavlova, de merengue y frutas rojas
Algunas teorías sugieren que este postre homenajea a Anna Pavlova, bailarina rusa que visitó Australia y Nueva Zelanda en 1926.
La receta de la tarta Pavlova, combina el merengue crujiente con la textura sedosa de la nata montada y el frescor de las frutas rojas, está en el centro de un debate entre Australia y Nueva Zelanda. No obstante, una tercera interpretación sobre su procedencia sugiere una conexión con Gran Bretaña, Estados Unidos y Alemania.
Historia de la tarta Pavlova
El postre lleva el nombre de la bailarina rusa Anna Pavlova que en 1926 estuvo de gira en Australia y Nueva Zelanda. De “La Paulova”, se decía. que cuando bailaba se elevaba por el aire como si tuviera alas.
Las dos hipótesis principales sobre la creación de la tarta Pavlova se refieren a dos chefs que trabajaban en hoteles de lujo de la época, uno en Australia y otro en Nueva Zelanda. Existe otra tercera teoría que involucra a Alemania, Estados Unidos y Gran Bretaña como veremos más tarde
Hipótesis de Nueva Zelanda
La versión neozelandesa sobre la creación de la tarta Pavlova tiene pocos datos, (aunque como veremos es probable que este postre surgiera en realidad en Nueva Zelanda).
‘Se cuenta’, la historia de un chef no identificado que trabajó en el hotel Wellington, donde se alojó la bella bailarina durante una gira por Nueva Zelanda y Australia en 1926. El chef, quedó tan cautivado con su actuación y su elegancia y se inspiró para crear este manjar en su honor.
Sin embargo, Helen Leach profesora neozelandesa especializada en antropología alimentaria por la Universidad de Otago y autora del libro. ‘The Pavlova Story: a slice of New Zealand' s Culinary History’ no pudo verificar esta versión.
No obstante, la Dra. Leach encontró menciones de tres postres llamados 'pavlova' en Nueva Zelanda, anteriores a la receta australiana del chef Sachse de 1935. El primero, una gelatina multicolor de la marca Davis Gelatina, data de 1926, coincidiendo con la visita de la bailarina a Nueva Zelanda.
En 1928, en Dunedin, surgieron pequeños merengues con sabor a café y nueces, que se hicieron muy populares en todo el país. El tercer postre, un gran pastel de merengue, apareció en 1929 en la publicación local Dairy Farmers Annual, llevando el nombre de la bailarina. Según Helen Leach, es este último postre el que ha desencadenado la disputa sobre su origen entre Australia y Nueva Zelanda.
Hipótesis de Australia
En el lado australiano se dice que fue el chef Herbert ‘Bert’ Sachse quién creó la Pavlova en el hotel Esplanade de Perth (Australia) en 1935, y el nombre—según esta hipótesis—, se le ocurrió al director del hotel, Harry Nairn que al probar la tarta dijo, ‘es tan ligera como la Pavlova’.
En una entrevista con Woman´s Day en 1973, el chef Sachse, dijo que la propietaria Elsie Plowmany el director del hotel Harry Nairn le habían contratado para hacer algo ‘diferente y único’ como un pastel o un postre.
El chef recordaba que el merengue horneado siempre le resultaba demasiado duro y crujiente, así que se propuso crear algo que tuviera una parte crujiente y otra cremosa. Tras un mes de experimentación surgió la receta que hoy conocemos.
Hipótesis de el Dr. Andrew Paul Wood y la australiana Annabelle Utrecht
La tercera teoría sobre el origen de esta elegante tarta fue sostenida por el Dr. Andrew Paul Wood y la australiana Annabelle Utrecht, que argumentaban que los orígenes de la tarta Pavlova involucran a Alemania, Estados Unidos y Gran Bretaña.
Hay alrededor de 150 pruebas que corroboran que se registraron variaciones del postre pavlova mucho antes de 1926.
Tras exhaustiva investigación de dos años en recetas ancestrales, el dúo compartió con el sitio web australiano Good Food el descubrimiento de más de 150 recetas de pasteles con merengue, reminiscentes de la pavlova, algunas incluso anteriores a la llegada de Anna Pavlova en 1926.
Receta de la tarta Pavlova
Ingredientes:
- 4 claras de huevo
- 150 g de azúcar
- 1 cucharadita de aroma de vainilla
- 1 ½ cucharadita de zumo de limón
- 2 cucharaditas de maicena o harina de maíz
- 450 g de nata para montar 35% MG
Para decorar:
- 80 g de fresas u otras frutas rojas (al gusto)
Utensilios:
- Molde redondo
- Papel de horno
Preparación:
- Comienza precalentando el horno a 150ºC y forra una bandeja con papel de horno.
- Coloca el molde redondo sobre el papel y marca su contorno con un lápiz.
- Espolvorea un poco de harina dentro del círculo marcado en el papel.
- En un recipiente, agrega las claras de huevo y comienza a batir hasta que formen espuma.
- Incorpora el zumo de limón y continúa batiendo hasta que las claras formen picos suaves.
- Añade el azúcar poco a poco, batiendo entre cada adición hasta que esté completamente integrado.
- Cuando el merengue esté firme, agrega el aroma de vainilla, el resto del zumo de limón y la maicena, mezclando suavemente.
- Vierte la mezcla de merengue dentro del círculo en el papel de horno, extendiéndola con cuidado para formar la base de la Pavlova.
- Hornea durante una hora a 150 ºC.
- Mientras tanto, bate la nata hasta que esté montada, con picos firmes.
- Una vez horneada la base de merengue, rellénala con la nata montada, cubriendo toda la parte superior.
- Para decorar, distribuye las fresas u otras frutas rojas sobre la nata.
- ¡Listo para disfrutar de tu deliciosa Tarta Pavlova!
En definitiva, la Tarta Pavlova es mucho más que un postre, es un símbolo de la creatividad culinaria y la diversidad cultural.
A través de su historia y sus múltiples interpretaciones, nos invita a explorar los sabores del mundo y a apreciar la repostería gourmet. Si te ha gustado el artículo compártelo en tus redes sociales y déjanos un comentario con tu opinión.