Gymtimidation: el miedo al gimnasio que invade septiembre
Con la vuelta a la rutina, muchos retoman el ejercicio físico, pero para otros la ansiedad y la presión social complican el regreso al gimnasio. Es una realidad que suele afectar más a las mujeres, razón por la que los centros exclusivamente femeninos son cada vez más habituales.
Con la llegada de septiembre, no solo se reanudan las clases y el trabajo, también aumenta considerablemente la cantidad de inscripciones en los gimnasios. Este fenómeno es una constante que se repite cada año, motivado por diversos factores, como el deseo de recuperar la forma tras los excesos veraniegos, o la necesidad de volver a una rutina estructurada después de un verano más relajado.
La sensación de haber disfrutado más de la cuenta durante las vacaciones en términos de alimentación y sedentarismo, también juega un papel importante.
Pese al entusiasmo que muchos experimentan al volver al gimnasio, no todos lo viven de la misma manera. El término 'gymtimidation' ha ganado relevancia para describir la ansiedad y miedo que algunas personas sienten al inscribirse o acudir a un gimnasio. Según una encuesta realizada por OnePoll y publicada en The New York Times, más de la mitad de los encuestados admitió haber sentido algún tipo de ansiedad al ir al gimnasio, y uno de cada diez aseguró que su salud mental les impide hacer ejercicio.
El psicólogo deportivo Andrés Cardona explica que esta sensación es más común de lo que parece y que tiende a intensificarse en septiembre, cuando la presión por retomar el ejercicio puede generar sentimientos de culpa por los excesos del verano o de obligación por ver a tantos otros volviendo al gimnasio. "Ese malestar no debe ser excesivo, es importante volver poco a poco", advierte.
La presión social y las mujeres en el gimnasio
Este fenómeno de 'gymtimidation' parece afectar más a las mujeres que a los hombres. Un estudio de la empresa británica Puregym reveló que el 67% de las mujeres siente algún tipo de miedo al acudir al gimnasio, frente a un porcentaje significativamente menor en los hombres. Cardona sugiere que las mujeres tienden a sentirse más juzgadas en estos espacios y buscan alternativas más seguras, como las clases colectivas o gimnasios exclusivos para mujeres, donde se sienten más cómodas.
De hecho, cada vez más gimnasios solo para mujeres han surgido en distintas partes de España, proporcionando un entorno donde las asistentes se sienten más seguras y menos observadas. Una de las cadenas pioneras en ofrecerlo fue O2 Centro Wellness, con la creación de un club deportivo exclusivamente femenino. Luego le siguieron otras como Arsenal, B3b o Barré.
Los expertos coinciden en que forzarse demasiado puede llevar a frustración y, eventualmente, al abandono del hábito. Ortiz recomienda que aquellos que estén retomando el ejercicio lo hagan con expectativas realistas. Si se entrenaba cuatro días a la semana antes de las vacaciones, empezar con tres días e ir subiendo la intensidad progresivamente es una buena estrategia.
Otra clave para una vuelta exitosa es no sentirse culpable si algún día no se puede cumplir con la rutina planificada. “No pasa nada si se falla algún día, lo importante es no convertirlo en una costumbre. Hay que permitirse algún desliz, siempre y cuando esté justificado”, aconseja Cardona.
Además, el psicólogo recomienda asistir al gimnasio acompañado. Ya sea con amigos, familiares o compañeros de trabajo, el ejercicio en compañía hace que la experiencia sea más divertida y ayuda a mantener el compromiso. Las clases colectivas también ofrecen una solución para aquellos que se sienten intimidados o aburridos entrenando en solitario.
El regreso al gimnasio en septiembre es una oportunidad para establecer un hábito saludable, pero es importante no dejarse llevar por la presión externa y ser consciente de las propias limitaciones. Crear una rutina, buscar apoyo y tener paciencia son las claves para lograr el éxito en este proceso.
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Consejos para retomar el deporte tras un largo periodo de inactividad
Después de un largo período de inactividad, retomar los hábitos deportivos puede ser difícil. La vuelta a la rutina, el miedo a las agujetas y la pereza son obstáculos comunes. Según el doctor José María Echave-Sustaeta, jefe de Neumología, el sistema cardiovascular y muscular requieren tiempo para readaptarse al ejercicio.
Para quienes retoman la actividad física, es recomendable empezar con ejercicios de fuerza usando el propio peso corporal, como sentadillas o zancadas, que pueden hacerse en casa. Aquellos nuevos en el running deben alternar caminata rápida con cortos periodos de carrera. Además, es esencial incluir calentamientos y estiramientos suaves antes y después de entrenar para evitar lesiones, favoreciendo así una vuelta progresiva y segura al deporte.