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La industria cerámica y agrícola investiga reutilizar el CO2 para riego

Un proyecto de investigación valenciano ha unido a la industria de la cerámica y a la agricultura para la mejora del medio ambiente y el uso eficiente del agua.

Maria Dolores Corvinos presentando Fertilife a los alumnos de la Escuela Técnica Superior Agronómica y de Medio Ambiente de la UPV

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Utilizar el dióxido de carbono (CO2) de la industria cerámica para uso agrícola es una realidad que está cada vez más cerca, gracias al trabajo que están realizando numerosas empresas y asociaciones azulejeras valencianas, a través del proyecto Fertilife.

Fertilife es un proyecto cofinanciado por la Unión Europea, dentro del Programa LIFE Mitigación del Cambio Climático, cuyo objetivo es desarrollar un sistema para capturar con agua el CO2 de una instalación industrial cerámica y, posteriormente, utilizar el agua carbonatada resultante para regar una plantaciones de cítricos.

Durante los primeros meses del proyecto y, en una parcela de cítricos de Onda que se seleccionó previamente, se instaló el cabezal de riego apropiado para realizar todas las pruebas previstas durante el proyecto. El agua utilizada para capturar el CO2 se utilizó para regar la parcela piloto de cítricos, especialmente de producción de la variedad Valencia Late, con el objetivo de demostrar la viabilidad del uso de agua carbonatada para riego como sumidero de CO2 industrial, como facilitadora de la absorción de nutrientes por parte de los árboles y como reductora del uso de quelatos. Además, se monitorizaron también la respiración edáfica del suelo, el contenido en nutrientes de las hojas o el calibre de la fruta, para valorar sus efectos positivos.

Sistema piloto de captura de CO2

Actualmente, el equipo implicado en el proyecto está trabajando en el diseño del sistema piloto de captura de CO2 más idóneo para ser instalado en la planta de emisión, que será construido en los próximos meses.

María Dolores Corvinos (Project Manager de Sistemas Avanzados Energéticos S.L.) presentó, ante los alumnos de la Escuela Técnica Superior Agronómica y del Medio Ambiente de la UPV, este proyecto europeo y todas las tareas de innovación que se está desarrollando en la captura de emisiones de Co2 de las industrias azulejeras para su implementación en riego, así como los avances y resultados obtenidos hasta la fecha.

Fertilife se inició en octubre de 2015 y se desarrollará hasta diciembre del año 2018, con el fin de seguir promoviendo el uso de la agricultura como un sumidero natural de CO2, al valorizarse este gas residual como acidificante del agua de riego. Aprovechando la proximidad entre las fábricas de la industria cerámica y los cultivos de cítricos, este proyecto, según los expertos implicados en él, "sería exportable a otras zonas, aparte de la Plana de Castellón, donde se ha desarrollado e iniciado, dado que la sinergia entre ambas actividades económicas es complementaria y puede ser muy fructífera".

La Unión Europea ha establecido unas cifras de limitación del crecimiento o de reducción de las emisiones de gases efectos invernaderos (GEI) a cada uno de los estados miembros en el denominado acuerdo de reparto de la carga. El sector cerámico debe limitar las emisiones de Co2 en el proceso de fabricación de sus productos, por una parte para cumplir con sus compromisos de reducción de emisiones para el período 2013-2020, y que no les suponga sanciones, y por otra parte, para aprovechar el excedente de derechos de emisión obtenidos, y así, obtener beneficios adicionales, mediante la venta de los derechos de emisión que se les asignara a título gratuito y que probablemente no van a utilizar por el descenso de la actividad productiva que se está produciendo en el sector.

Este proyecto está coordinado por la firma Sistemas Energéticos S.L., y cuenta con la participación de Euroatomizado S.A., La Unió de Llauradors i Ramaders, ASCER (Asociación Española de Fabricantes de Azulejos y Pavimentos Cerámicos) y el Instituto de Tecnología Cerámica.