Ruptura de los gobiernos PP-Vox
Adiós al Gobierno de PP-Vox en la Comunitat Valenciana: Abascal rompe y Mazón gobernará en solitario
El líder de Vox toma la drástica decisión pese a la oposición de los cargos valencianos del partido. El presidente de la Generalitat descarta elecciones y nombrará un nuevo gobierno sólo del PP
El líder de Vox, Santiago Abascal, ha llevado su “testosterona” -como definía hoy un dirigente político- hasta el final y ha decretado la defunción del gobierno de coalición entre PP y Vox en la Comunitat Valenciana junto con los de Murcia, Aragón, Castilla y León y Extremadura. El reparto de 300 menas -20 que tocan a la Comunitat Valenciana- ha sido el argumento para este giro radical en la estrategia de Vox que supone un cambio del panorama electoral y de gobierno.
Justo cuando se cumple un año de la puesta en marcha del nuevo gobierno de la Generalitat Valenciana de Carlos Mazón, llega Abascal y con su titadine dinamita la presencia de los consellers de Vox. Tal y como ha anunciado el líder de Vox, el vicepresidente Vicente Barrera presentará su dimisión -junto con la de los consellers de Agricultura y Justicia- durante el viernes 12 de julio.
Santiago Abascal no ha tenido contemplación con las voces que le pedían que la sangre no llegara al río, especialmente desde territorio valenciano, donde fuentes indican a ESdiario que el vicepresidente, los consellers, la presidenta de Les Corts y la dirección de Vox en Valencia habían trasladado que no querían romper el gobierno con el PP e instaban a analizar todos los contras que llevaba esta decisión. Sin embargo, Abascal ha tirado adelante. Las caras de los dirigentes de Vox en las Cortes Valencianas o durante la comparecencia de Abascal lo dicen todo.
Por parte del PP, Carlos Mazón ha dejado claro que “el gobierno del cambio sigue”, descartando con ello la convocatoria de elecciones y mostrando su disposición a acabar toda la legislatura, pactando con Vox -ahora desde la oposición- “o con cualquiera que traiga una buena idea”.
Carlos Mazón por tanto gobernará en solitario y deberá remodelar su gobierno con nuevos consellers del PP. Se espera que Susana Camarero gane protagonismo y se quede como vicepresidenta primera e incluso asuma la portavocía del Consell. Además, Mazón deberá dar cabida a otros tres consellers y puede aprovechar para retocar y redistribuir las competencias entre las consellerias.