La ministra Morant no sabe de cuentas

Las frases hay que leerlas enteras para no perder el significado. También, interpretarlas en un determinado contexto. Viene al caso esta reflexión a resultas del mensaje de Diana Morant en la red social “X” -antiguo Twitter- el pasado 31 de julio. Califica el acuerdo suscrito entre ERC y el PSC para llevar a Salvador Illa a la presidencia de la Generalitat de Cataluña como positivo, cerrando la primera frase con una afirmación: “asegura la solidaridad”. Si tal acuerdo incluye la creación de un “concierto económico solidario”, fácil es suponer que el calificativo “asegura la solidaridad” se refiere a que hay otros conciertos económicos insolidarios. Estos solo pueden ser los previstos para el País Vasco y Navarra. Preocupante lo que sostiene Diana al contextualizar el final de su frase.

Está por ver cómo encaja legalmente la “aportación a un supuesto fondo de solidaridad” cuando no está previsto en la LOFCA. Sin embargo, es sabido lo que sostiene Mikel Buesa al examinar los efectos de veinte años del Cupo Vasco, “...nos podemos preguntar qué sacaron las administraciones vascas. La respuesta nos la da la trayectoria del porcentaje del PIB vasco destinado a satisfacer el Cupo cada año; una trayectoria que avala el principio general que en 1852 enunció Pedro de Egaña: “el Fuero es no pagar”. Un principio que, en los tiempos actuales tiene el sentido de pagar lo menos posible al Estado. Y así, el País Vasco ha pasado de soportar una carga del 2,4% del PIB entre 2002 y 2008, al 1,6% entre 2017 y2021, el periodo más reciente”.

Y ese final de frase lo va a repetir Diana como si fuera el mantra de la temporada

Si ese es el contexto de la frase, lo que se le va a facilitar a la Generalitat de Cataluña, y siguiendo la misma lógica de Pedro de Egaña y Mikel Buesa, es “pagar lo menos posible al Estado”. La solidaridad interterritorial prevista en la Constitución de 1978 se va a quebrar, si no estaba quebrada ya por su privilegiada disposición adicional primera. Una situación que no anda desconectada de lo que esconde la segunda frase del Twitter: “Es Pedro Sánchez quien garantiza la igualdad financiando como nunca a las CCAA…”. Y termina: “…también a la Comunitat, que ha recibido 30.000 millones más que con el último gobierno del PP”. Y ese final de frase lo va a repetir Diana como si fuera el mantra de la temporada.

Sin decir de dónde saca la cuenta, el único referente es la cantidad apuntada por Pedro Sánchez en su rueda de prensa del mismo día cuando afirmaba que en los últimos siete años, el Estado ha transferido a las CC.AA. 300 mil millones de euros. Sabedora Lydia del Canto, redactora en Valencia de sus argumentarios para Madrid, que la Comunitat es “la región del 10%” ...del PIB, de la población y de las exportaciones… la aritmética atrevida lleva a la conclusión de la cantidad: 30 mil millones de euros, el 10% de lo afirmado por Pedro Sánchez. No hay que desdecir al Caudillo.

La Comunitat se situaría la primera del ranking autonómico, acercándose a los 60 mil millones de euros de deuda acumulada y mil millones de servicio anual de la deuda

El Twitter de Diana Morant es torticero y engañoso. Lo primero, porque coloca al liderazgo de la sucursal valenciana del PSOE a contracorriente de los lideres socialistas de las CC.AA. críticos con los acuerdos del PSC con ERC, que lo único que pretenden es “defender lo suyo” ante tal agresión a las finanzas del Estado Autonómico del título VIII de la Constitución. Y lo que es más grave, con su actitud torticera se sitúa en contra de los intereses de la Comunitat. Si el acuerdo se materializa y Cataluña se sale del régimen común de la LOFCA, la Comunitat pasaría a ser la más endeudada de las 12, excluidas las tres del concierto económico, y la peor financiada. Se situaría la primera del ranking autonómico, acercándose a los 60 mil millones de euros de deuda acumulada y mil millones de servicio anual de la deuda.

Pese a ello, repiten cual nuevo mantra Diana Morant y los suyos, que el responsable de tal desaguisado es el presidente Carlos Mazón que con su política de reducción fiscal “favorece a los ricos”: el 1% de la población. Precisamente es ese mantra el que contiene el engaño. No sabíamos que, gracias a la “banda de los cuatro”: Diana, Muñoz, Bernabé y Soler, el 1% de la población de la Comunitat era rica por percibir una renta menor o igual a 30 mil euros anuales, los beneficiarios de las deducciones fiscales varias al tramo autonómico del IRPF; ya en este ejercicio fiscal de 2024. Ni que, en sus declaraciones recientes, a sabiendas escondían los efectos de haber quitado el Consell el “impuesto de la muerte”. Solo consultar las estadísticas de la Agencia Tributaria Valenciana para que a lo cuatro se les vea el plumero. En los primeros seis meses de 2024, la Agencia ha recaudado un 3,5% más que en el mismo periodo de 2023 con el expresidente Ximo Puig. En impuestos propios y cedidos ha recaudado 1.096 millones de euros.

Mientras, de la propuesta de un fondo de nivelación transitorio para igualar a la media, el peso del PIB regional con el de lo transferido del fondo interterritorial del actual modelo obsoleto de la LOFCA, hasta que no se reforme, y que importa más de 1.700 millones de euros, lo que hay es una callada por respuesta. De ambas ministras, la Montero y la Morant. Extraño caso de una egresada de la Politécnica de Valencia como es la segunda, que se supone sabe de cuentas. Solo explicable por su dependencia de Pedro Sánchez. Pero se lo tendrá que explicar a sus compañeros de la calle Hospital en Valencia, donde la sede del PSOE, desconcertados y de los nervios por ese supuesto liderazgo a la deriva, gestionado por la antigua DirCom de Balearia desde la distancia del palacete madrileño.