El niño fallecido en el asalto de Elda pudo morir de un infarto y no asesinado
La Policía Nacional afirma que el menor no presentaba heridas de arma blanca, contusiones u otros signos de violencia.
Policía científica investigando el lugar de los hechos.
El atroz suceso que ha conmocionado la localidad alicantina de Elda en el cual un niño de ocho años ha aparecido presuntamente asesinado mientras la pareja sentimental de su padre de acogida, ausente en el momento de los hechos, fue agredida en el domicilio familiar ha dado un importante giro.
La Policía Nacional investigaba inicialmente si la mujer, de 36 años, fue violada por los asaltantes, pero la propia víctima ha negado este extremo, aunque sí pudo sufrir abusos sexuales. Mientras, se está a la espera del resultado de la autopsia del menor, que sufría diversas patologías.
La Policía investiga si el menor, que sufría autismo, pudo morir como consecuencia de un ataque al corazón o un ataque epiléptico
La Policía investiga si el menor, que sufría autismo, pudo morir como consecuencia de un ataque al corazón, tampoco se descarta que sufriera una complicación respiratoria derivada de una crisis epiléptica al presenciar la agresión a la pareja de su padre, que en el momento de producirse los hechos se encontraba trabajando. Éste, en el momento que conoció la noticia tuvo que ser reducido y esposado por los agentes al estar fuera de sí. Las dos últimas semanas, la pareja -que mantenía una relación sentimental desde hacía un año- había recibido notas amenazantes en el buzón.
Cuando pudo entrar en el domicilio, una vecina halló al menor muerto y a su madre, sordomuda y que está embarazada de cuatro meses, maniatada y con la cabeza cubierta por una bolsa de plástico.
Las pesquisas se centran en dos hombres que portaban sendos cascos y que habrían sorprendido en el rellano de la escalera a la mujer y al niño cuando ambos se disponían a salir a la calle sobre las ocho de la tarde. La puerta de la vivienda no estaba forzada y tampoco hay indicios de robo, aunque fuentes de la investigación no descartan ningún móvil, ya que la mujer procede de una familia adinerada.
Fuentes policiales han indicado que el niño todavía vivía cuando llegaron los servicios médicos, pero sus intentos por reanimarlo no tuvieron éxito y falleció tras sufrir una parada cardiorrespiratoria, mientras que la mujer fue trasladada al hospital de Elda.