Barcala carga contra el tripartito por no inspeccionar a la contrata de basura

Tras los días de huelga de basuras que ha sufrido la ciudad de Alicante, el concejal popular Luis Barcala, ha insistido en responsabilizar al equipo de gobierno del Ayuntamiento del mal funcionamiento del servicio del limpieza “por no controlar a la contrata, desde el momento en el que no se han hecho auditorías para evaluar el servicio para saber si la empresa está cumpliendo con lo establecido en el pliego de condiciones o no”.

Para el edil se esta incumpliendo con la palabra dada ya que " cuando llegaron al gobierno de la ciudad dijeron claramente que iban a solucionar el problema de la limpieza y que sabían cómo hacerlo". Según ha denunciado “lo que tiene que hacer el tripartito es hacer cumplir con las obligaciones que el pliego establece también para el Ayuntamiento, que son las labores de control, de planificación y de inspección, porque si aquí nadie inspecciona, nadie controla y nadie planifica nada, entonces la UTE que gestiona la limpieza de la ciudad hará el trabajo como entienda y eso dará el resultado que estamos teniendo”, ha explicado Barcala.

El dirigente popular ha querido recalcar que “el pliego de condiciones técnicas de la contrata de basuras es ejemplar en cuanto a lo exhaustivo que es a la hora de definir los servicios que la empresa se tienen que prestar, y llega a establecer los criterios de cómo evaluar la calidad, por lo que lo que hay que hacer es aplicarlo”.

Al mismo tiempo, Barcala ha señalado también a la UTE adjudicataria del servicio de limpieza que “cuando concurrió en esta licitación hizo una propuesta económica comprometiéndose a cumplir con lo que el pliego indica, por lo que plantear ahora si se llega o no con ese dinero es algo que uno debe saber cuando licita y se ofrece a hacer un trabajo, no a posteriori”. En la actualidad las competencias de limpieza en el consistorio alicantino recaen en el vicealcalde y concejal de urbanismo Miguel Pavón.

La escasez de limpieza en las calles de Alicante ya provocó que un informe de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) la situara como una de las ciudades más sucias de España. En el informe que esta asociación hace cada cuatro años entre las principales ciudades de España, sus vecinos la situaron como la tercera peor valorada de toda España.