Los agricultores exigen que el Gobierno abra ya el grifo del trasvase del Tajo
Los agricultores estiman que se cumple el Memorándum del Tajo-Segura, ya que se rebasa ampliamente la línea roja de los 400 hectómetros cúbicos.
Nevada espectacular en la Sierra albaceteña de Alcaraz, que con el deshielo irá a parar al Segura.
Las continuas lluvias que están cayendo en España durante las últimas semanas están llenando los embalses y pantanos –algunos tienen que arrojar los excedente de agua al estar a su máxima capacidad- y con ello las esperanzas de miles de agricultores de Alicante, Murcia y Almería, que están esperando, nunca mejor dicho, que la Confederación Hidrográfica del Segura habrá el grifo.
Porque a día de hoy, y en espera que penetren otros frentes desde el Atlántico entre este viernes y el próximo martes, la situación no tiene nada que ver con la sequía de hace unos meses, que echó a la calle a miles de agricultores en sendas manifestaciones celebradas en Murcia y Madrid.
Río Mundo, en la cabecera del Segura.
José Andújar, presidente de la comunidad de regantes Riegos de Levante Margen Derecha del Segura, y vicepresidente del Sindicato Central de Aguas de Acueducto Tajo-Segura (SCRATS), tiene la esperanza que el próximo 1 de abril, cuando se reúne la Comisión de Explotación del Trasvase Tajo-Segura, la directora general del Agua, Liana Ardiles, dé luz verde al primer trasvase de la temporada de unos 20 hectómetros cúbicos, que irían a parar a esta parte del Levante español que ha sufrido como ninguna otra los efectos de una pertinaz sequía, que puede darse por concluida si nos atenemos a los datos de lluvia y nieve que están llenando nuestros embalses.
Los embalses de Entrepeñas y Buendía tienen ya por encima de los 430 hectómetros cúbicos almacenados. Según el Memorándum Tajo-Segura, la línea roja para empezar con los trasvases
Andújar estima que los embalses de Entrepeñas y Buendía tienen ya por encima de los 430 hectómetros cúbicos almacenados. Según la ley, concretamente el Memorándum Tajo-Segura, una vez rebasada esa cantidad de agua embalsada en la cabecera del Tajo, los excedentes irán a parar al trasvase, por lo que lo normal es que este mismo abril se produzca el primer desembalse con destino al campo alicantino, murciano y almeriense.
El presidente de los regantes estima que la situación en las próximas semanas va a ser aún mejor ya que a medida que empiece el deshielo, hay mucha nieve acumulada en las montañas, los embalses de la cabecera del Tajo van a ir mejorando muy por encima de los 8 a 9 hectómetros cúbicos diarios como sucede ahora, lo que puede disparar el almacenamiento de agua por encima de los 550 hectómetros cúbicos, una situación impensable sólo hace un mes.
De hecho, el director general del Instituto Euromediterráneo del Agua y asesor del Ministerio, Francisco Cabezas, indicó recientemente a La Verdad que casi con toda seguridad se reabrirá el acueducto en abril porque las reservas superarán en breve los 400 hectómetros cúbicos, la línea roja establecida en el Memorándum a partir de la cual se puede trasvasar agua a la Región de Murcia, Alicante y Almería.
En la cabecera del Segura se va a embalsar más de 200 hectómetros cúbicos gracias al agua y la nieve caídas
Pero es más. José Andújar habla del agua que se está embalsando en la cabecera del Segura, en la Sierra del Alcaraz, que aportará más de 200 hectómetros cúbicos porque as cumbres están totalmente nevadas, como se aprecia en la fotografía que ilustra esta información.
José Andújar: "La solución no son las desalinizadoras, cuya explotación es cara y sus aguas deben mezclarse con la de riego para que sirvan al agricultor, lo que dispara los costes"
El presidente de la comunidad de regantes Riegos de Levante Margen Derecha del Segura afirma que ante esta situación tan positiva es hora de actuar sobre la interconexión de las cuencas. “Hace unos meses, cuando no llovía en toda España, dije que en este país sobra el agua, y a los datos me refiero. Lo que hay que hacer es redistribuirla entre las cuencas para que estos excedentes que se dan ahora no se pierdan”.
Además, afirma que la solución no son las desalinizadoras, cuya explotación es cara y sus aguas deben mezclarse con la de riego para que sirvan al agricultor, lo que dispara los costes. "Lo que tenemos que hacer ahora es estudiar y proyectar un plan hidrológico nacional que sea justo con todas las regiones y redistribuya el agua por las cuencas de este país. Y lo digo ahora cuando estoy convencido que esta vez sí que nos va a llegar el agua”.