Sigue la "guerra del agua": los ecologistas se unen al "no es no" al trasvase
La "guerra" contra el trasvase del Tajo al Segura arrecia aún más tras haber abierto la veda la ministra de Sánchez, Teresa Ribera, contraria a ellos, aunque "salven" el Levante español.
Ecologistas en Acción considera urgente derogar las normas de explotación del trasvase Tajo-Segura y adaptar la agricultura de la zona a los propios recursos hídricos, tras la aprobación este miércoles por parte del Gobierno de un nuevo trasvase de 38 hectómetros cúbicos para el presente mes.
De lo que no habla esta organización ecologistas es que la supresión del trasvase del Tajo-Segura dejaría a miles de familias sin recursos y sería un duro golpe para la agricultura nacional. Desde los sindicatos agrarios opinan que no es de extrañar la postura de los ecologistas, "porque si de ellos dependiera la gobernabilidad del país, aún estaríamos en la edad de piedra". Más que los ecologistas les preocupa la deriva que está tomando el Gobierno de Pedro Sánchez en este asunto.
La organización ecologista ha llamado al Gobierno "a la cordura" y le insta a replantearse la medida al asegurar que no existe una obligación legal para que este sea realizado automáticamente. "Esta decisión es arbitraria, irresponsable e injustificable desde un punto de vista de la gestión ambientalmente sostenible de la cuenca del Tajo", denuncia. Sin embargo, no hace mención a las declaraciones de la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, quien afirmó esta semana que los trasvases deben ser puntuales y "extraordinarios", apostando por las desaladoras para las regiones con escasos recursos hídricos.
Pese a ello, los ecologistas quieren más. La ONG ha expresado su rechazo absoluto al trasvase y considera los embalses de cabecera deben ser gestionados en el marco del plan hidrológico del Tajo para que puedan ser atendidas primero las propias demandas de la cuenca, lo que conllevaría establecer un régimen ecológico de caudales en Aranjuez, Toledo y Talavera.
Además, reclama que se transforme de forma urgente el modelo de agricultura para adaptarla a sus propios recursos, lo que desembocaría en el medio plazo en el fin y clausura del trasvase.
Para la ONG la comisión técnica del trasvase reproduce "los mismos criterios seguidos por los Gobiernos del PP" y somete a la cabecera del río a una presión hídrica "insostenible".
La Comisión Central de Explotación del Trasvase Tajo-Segura aprobó este miércoles una transferencia de 38 hectómetros para el mes de julio con los embalses de Entrepeñas y Buendía por encima de 700 hectómetros cúbicos. Sin embargo, la ONG advierte de que el volumen de ambos embalses está "muy por debajo de tener condiciones para soportar este desembalse", ya que están al 43 por ciento de su capacidad Entrepeñas y al 21 por ciento, Buendía.