César Sánchez dice que luchará contra un Consell "radical y separatista"

El presidente de la Diputación de Alicante, César Sánchez, ha arremetido nuevamente contra el Consell por su intención de llevar adelante una propuesta que restará autonomía, independencia y libertad de acción a los entes locales. La nueva normativa sobre administración local que prepara el Gobierno valenciano limitará las competencias de las instituciones provinciales, un hecho que “atenta contra la autonomía local”, según ha puntualizado Sánchez, quien ha criticado con firmeza la “unilateralidad de un gobierno autonómico cuyo mandato se basa en las imposiciones y en la falta de diálogo y consenso con el resto de administraciones del territorio”.

“No podemos confiar en un Consell que sistemáticamente ataca a las diputaciones y a la división territorial en provincias y cuya única ocupación es acabar con la autonomía de los entes locales para usurpar sus competencias y presupuestos, para controlar sus planes e iniciativa y para implantar su posicionamiento ideológico radical y separatista”, ha manifestado Sánchez.

El presidente de la Diputación de Alicante ha asegurado que persistirá en su objetivo de defender a los 141 municipios de la provincia para que estos tengan derecho a elegir sus propios planes de inversiones y las obras necesarias que impulsen el desarrollo de sus localidades.

“Bajo el engaño de la coordinación, los socios del tripartito valenciano buscan controlar la actividad de unas instituciones cuya autonomía se reconoce en la Constitución Española y que aúnan la voluntad de los pueblos que las conforman. Querer controlar desde Valencia la acciones, planes e inversiones que se ejecutan y que responden a las demandas reales de nuestro territorio es una burda maniobra ideológica y electoralista, controladora y propia de un gobierno que practica el nepotismo”, ha concretado Sánchez.

En esta línea, el responsable institucional ha recalcado que “lo que tiene que hacer el Gobierno del Botànic es ocuparse de las carencias infraestructurales de la provincia de Alicante, de la falta de inversiones y de las necesidades y demandas reales de los ciudadanos. No de imponer sus criterios y su pensamiento sesgado y partidista cuya finalidad es romper la estabilidad institucional y perder el respeto a otras administraciones”.