La otra cara del cierre de Pubs: 42 fiestas en pisos a unos 3.000€ de sanción
La persecución de Ana Barceló hacia el ocio nocturno ha recuperado los ‘guateques’ en viviendas y ha rebrotado los botellones en playas y descampados, donde no se respetan las normas covid
El cierre del ocio nocturno está generando la proliferacón de fiestas en viviendas partculares
El empeño de la Consellera de Sanidad, Ana Barceló, de poner coto al ocio en pubs y discotecas –especialmente en las noches del fin de semana- hace que se ingenien otras formas de diversión. A muchos jóvenes la restricción les ha venido bien. Las fiestas en domicilios particulares tienen más intimidad, se evitan molestias de compañías no deseadas y son más baratas.
La prohibición de la apertura de locales nocturnos ha recuperado los ‘guateques’ en viviendas particulares y ha rebrotado los botellones en playas y descampados, donde no se respetan las normas covid
42 Guateques el fin de semana 'pillados'
La Policía Local de Alicante ha tramitado este fin de semana 42 denuncias por fiestas en viviendas, cuya sanción puede llegar a 3.000 euros, y ha impuesto otras cuarenta por no llevar mascarilla y realizar botellones, además de sancionar a tres locales de ocio, en el marco del dispositivo para hacer frente al Covid.
El concejal de Seguridad, José Ramón González, ha informado a Esdiario de que las unidades GOIR, FOX y Servicio Nocturno de la Policía Local tuvieron que disolver varios botellones que se celebraban en la ciudad, y se impusieron catorce actas por consumo de alcohol, y una por sustancias estupefacientes.
ALROA dice que son muchos más
El presidente de la Asociación de Locales de Restauración y Ocio de Alicante ALROA, Javier Galdeano, asegura que "son muchas más, lo que pasa es que no las pueden localizar todas porque muchas se celebran en lugares donde son difícil de detectar, como chalets o casas sin vecinos".
Los fines de semana el Ayuntamiento de Alicante intensifica los controles de tráfico de alcohol y sustancias estupefacientes. La Policía Local ha recibido 42 llamadas alertando de fiestas en viviendas, que ha obligado a los agentes a tener que intervenir, trasladarse a las viviendas de particulares para su comprobación, aviso y sanción a los propietarios por parte de las patrullas, que pueden llegar a ser de entre 750 y 3.000 euros.