Un concejal deja plantado al alcalde y al pleno para abrir la puerta de su casa
El edil nacionalista Rafa Mas evidencia que el debate sobre el proyecto del Faro no le importa. Ha cortado su discurso cuando estaba en el uso de la palabra al recibir una visita en su casa
La cara del alcalde y los concejales del pleno en el Ayuntamiento de Alicante era un poema. No lo podían creer, pero pasó. Durante el uso de su turno de palabra, al concejal de la coalición Compromís, Rafa Mas, le ha llamado al telefonillo de la puerta de su casa. El edil ha interrumpido su discurso para ausentarse del pleno e ir a abrir la puerta, argumentando que “mi piso es pequeño, vivo solo y no hacen más que interrumpirme con el teléfono” –refiriéndose al interfono de la puerta de la calle-.
En el espacio de tiempo en el que el concejal ha dejado plantados a los participantes en la sesión plenaria municipal, el resto de ediles han expresado gestos de incredulidad -véase la foto (captura de pantalla del momento)-. El alcalde, Luis Barcala, ha exclamado de manera irónica: “pues nada hombre, esperaremos a que termine usted de hablar por teléfono”, pero seguidamente le ha dado la palabra a otro interlocutor.
Al reincorporarse a su lugar, Rafa Mas ha querido recuperar el turno de palabra excusándose en que “es que vivo solo y me han bombardeado a llamadas y me han interrumpido una y otra vez”, y ha preguntado al alcalde: “Si quiere termino ahora cuando atienda a la persona”. El primer edil le ha recordado que “no sé si es usted consciente de que le pagan los alicantinos por estar en el pleno, no por estar atendiendo el teléfono a un amigo”. El primer edil le ha recordado -después de ser interpelado constantemente por Rafa Mas- que ha abandonado el pleno y que eso le ha hecho perder su turno de palabra.
Abandona el debate del Faro por una misteriosa visita
En el momento en el que Rafa Mas ha abandonado el pleno estaba criticando el vídeo del alcalde en defensa del proyecto del Faro del Cabo de las Huertas, un debate propiciado por la moción presentada por el grupo Unidas Podemos. Eso no ha impedido que priorizase interrumpir su crítica para ir a abrir la puerta, lo que evidencia el poco interés real que le despierta este asunto.
El concejal podría haber acabado su turno de palabra y después contestar al interfono de la puerta, ya que llevaba unos minutos argumentando sobre la privatización que Puertos de España –dependiente del Gobierno Central- y exponiendo la posición de su grupo sobre este proyecto. Pero ha sonado el telefonillo de la puerta y todo ha cambiado. La misteriosa visita del concejal Rafa Mas ha cambiado las prioridades de su intervención, y ha abandonado el discurso para atenderla.