Almirón le regala un punto al Valladolid
Las malas decisiones del técnico argentino tiran al traste un 0-2 en el descanso
Partido clave el de ayer en el Nuevo Zorrilla para el futuro a corto y medio plazo del Elche en La Liga. Clave porque nos enfrentábamos a un rival directo en la lucha por la salvación, clave porque se sumaban once jornadas sin conocer la victoria, clave porque una victoria hubiera permitido salir de posiciones de descenso y clave por el calendario que le espera al club ilicitano en sus tres próximas citas, F.C. Barcelona, Valencia y Villarreal, ahí es nada.
El encuentro no podía comenzar mejor para los intereses de los de Almirón, con un Josan que volvió a ser el de las primeras jornadas de Liga, actuando de carrilero con toda la banda derecha para él, conseguía en el minuto ocho un golazo desde la esquina izquierda del área grande. El Elche fue durante toda la primera mitad, un equipo muy diferente al que pudimos ver frente al Getafe, mucho más vertical, sin ese toque cansino de otras jornadas. En el minuto cuarenta y tres, y una vez más el jugador crevillentino, después de un pase magistral de Gonzalo Verdú, lanzaba un disparo seco y cruzado que nada pudo hacer Masip y ponía el cero a dos en el marcador y el segundo en la cuenta particular de Josan.
Se llegaba al descanso y todo hacía presagiar que, visto lo visto en la primera parte, el Elche iba a tener por fin un partido cómodo, con los tres puntos que tanto necesitaba en el bolsillo. Pero nada más lejos de la realidad, la ansiedad, el miedo a perder y sobre todo unos cambios tácticos totalmente desacertados por parte de Almirón, hicieron que el equipo se metiera prácticamente en su área los últimos veinte minutos de partido. En el minuto setenta y uno llegaría el uno a dos, obra de Míchel desde la frontal, con toda la defensa ilicitana defendiendo en el área pequeña. Y en el ochenta y nueve, llegaría el empate, tras una falta totalmente absurda e innecesaria de Barragán, Hervías ponía un centro medido a la cabeza de Joaquín y todo lo bueno que se hizo en la primera mitad se tiró a la basura.
Un punto que de nada le vale a un Elche que suma ya doce jornadas sin conocer la victoria. Un entrenador que, como venimos advirtiendo en esta sección cada semana, ya no tiene soluciones para sacar al equipo de esta auténtica debacle de juego y resultados, y un propietario que, si realmente aprecia lo invertido en este club y los futuros pagos que aún le tiene que hacer a Pepe Sepulcre, debería ya anunciar el cese del técnico argentino que no es capaz de revertir esta situación. Esperamos que para el señor Bragarnik, prime más el interés del club que el de un representado suyo, Almirón.