Se disfraza de trabajador para robar durante meses en una zona residencial
Empleaba un mono de trabajo para cometer los delitos con la finalidad de evitar que los vecinos sospecharan de su presencia y vendía los objetos robados en mercados de segunda mano
Agentes de la Guardia Civil de Alicante han detenido a un hombre que se disfrazaba de trabajador de mantenimiento para robar en una zona residencial de la localidad de Torrevieja. El presunto autor empleaba un mono de trabajo para cometer los delitos con la finalidad de evitar así que los vecinos sospecharan de su presencia en la zona.
Al detenido se le imputan cinco delitos de robo en viviendas en esta zona, en la que durante varios meses consiguió pasar desapercibido ataviado con indumentaria de trabajo, que en realidad únicamente empleaba para evitar ser descubierto, según detalla el Instituto Armado en un comunicado.
Incremento de robos en la zona
Hace unos meses, la Guardia Civil detectó un incremento de los robos en interior de viviendas ubicadas en una zona residencial de Torrevieja, por lo que iniciaron las investigaciones oportunas para localizar al posible autor.
Los agentes observaron que la persona que cometía los robos conocía bien las viviendas y que, aprovechando la ausencia de los propietarios, accedía fracturando las puertas o ventanas situadas en la parte trasera y se tomaba el tiempo necesario para entrar a robar todos los objetos de valor que encontraba en el interior, tales como aparatos tecnológicos, electrodomésticos de pequeño tamaño, herramientas eléctricas, etc.
Los agentes comenzaron por vigilar las inmediaciones para tratar de detectar la presencia de personas que pudieran resultar sospechosas. Gracias a las cámaras de videovigilancia de uno de los domicilios en los que el autor cometió uno de los robos, los agentes contaron con una detallada descripción física de la persona que estaban buscando.
En un momento dado, localizaron a un individuo que merodeaba de forma frecuente por la zona, con un uniforme asimilado a un mono de trabajo, si bien se comprobó que no desarrollaba ninguna actividad laboral en ese lugar. Así, con el atuendo elegido, había conseguido pasar desapercibido para los vecinos de la zona.
Los investigadores comprobaron que el presunto ladrón vendía los objetos precedentes de los robos en mercados de compra y venta de objetos usados, o bien les daba salida en el mercado negro.
El valor total de efectos sustraídos en los cinco robos que se le imputan asciende a 10.000 euros, según los cálculos de la Guardia Civil, que ha logrado recuperar un gran número de ellos, los cuales ya han sido devueltos a sus legítimos propietarios.
Una vez plenamente identificado, el pasado 27 de julio fue detenido un hombre de 33 años de nacionalidad ucraniana y asentado en Torrevieja, al que le constan numerosos antecedentes. Se le imputan cinco delitos de robo en interior de vivienda. Las diligencias han sido puestas a disposición del Juzgado de Instrucción de Torrevieja.