Urgencias de Torrevieja llama a la Guardia Civil ante el "caos" hospitalario
La dirección del centro ha decidido desviar todas las ambulancias a otros hospitales de la zona
El colapso que se vive en el servicio de urgencias del Hospital de Torrevieja ha provocado una fuerte discusión entre el personal sanitario y la dirección del centro. Durante esta misma madrugada, el jefe del hospital y el supervisor a cargo del servicio han remitido unos correos a las autoridades directivas para advertir que la situación estaba siendo “catastrófica” y que posteriormente interpondrían una denuncia ante la Guardia Civil como medida preventiva para evitar el ingente número de querellas al servicio de urgencias que, según comentó por teléfono a la dirección del centro, se podrían suceder por dicha situación.
No fue hasta siete horas más tarde cuando la dirección decidió ponerse en contacto con el coordinador del CICU de Alicante para pedirle que se desvíen todas las ambulancias limítrofes ante el “colapso” del centro. El coordinador, por su parte, contestó que las emergencias reales no podrían ser desviadas a un hospital excesivamente alejado de la zona por el riesgo que conlleva el traslado, pese a que sí intentaría remitir aquellas que no fuesen urgentes.
Como consecuencia de ello, el Comité de Empresa del Departamento del Hospital de Torrevieja ha convocado una rueda de prensa para explicar la “extraordinaria gravedad” del centro como consecuencia de la “deficiente gestión” que se está viviendo desde que se materializase el proceso de reversión de Torrevieja el pasado 15 de octubre. Una coyuntura que ha provocado ya la dimisión de varios profesionales, dejando la plantilla bastante mermada tras pasar de 36 sanitarios a tan solo 18 entre bajas y renuncias voluntarias, lo cual también se traduce en un brusca caída de la calidad asistencial. Esta mañana quedaban todavía 31 pacientes pendientes de ingreso, otros 39 pacientes para ser vistos con un tiempo medio de espera que oscila entre las 16 y 24 horas, 31 pacientes en observación y sin camas disponibles para poder realizar ingresos.
El Comité ha pedido la dimisión de la gerente del Hospital, Pilar Santos, y de los directores médicos, quienes acusan a los facultativos de poner en marcha una “huelga encubierta” para torpedear la gestión. Lo cierto hasta el momento es que la incapacidad para atender de urgencia a los pacientes también podría repercutir a la actividad económica de la zona estas Navidades, ya que su turismo siempre se había caracterizado por tener una buena calidad asistencial.