La pregonera de la Semana Santa callosina reivindica a la mujer en procesiones
Ascensión Palazón anima a los cristianos a “sacar nuestra fe a las calles y plazas, ante la progresiva secularización de la sociedad, para que los más pequeños asimilen la pasión de Cristo”
Catequesis, emoción y sentimiento religioso –junto a la reivindicación del papel de la mujer en los desfiles procesionales- fueron los condimentos con los que Ascensión Palazón López elaboró el Pregón de la Semana Santa de Callosa de Segura, celebrado en la iglesia arciprestal de San Martín completamente abarrotada de fieles que tributaron una larga ovación a la pregonera al término de su intervención. En torno al altar del templo, especialmente engalanado para la ocasión, se colocaron los estandartes de las diferentes cofradías y hermandades callosinas.
Tras la misa oficiada por el párroco Juan Bautista Samper Sellés, intervino el vicepresidente de la Junta Central de Semana Santa, Antonio Ballester Manresa, y seguidamente, Leticia Serna Amat, representante de la Cofradía de La Soledad en la Junta, presentó a la pregonera. Ascensión Palazón comenzó con un recuerdo a las personas que se fueron como consecuencia de la pandemia y también hacia sus padres, José María y Conchita, que le inculcaron el amor por la Cofradía del Ecce-Homo, y a su familia que la ha apoyado en todo momento.
Recordó que consta documentalmente que, con la llegada de los Padres Alcantarinos, aparecen en Callosa las primeras manifestaciones pasionales y que “era aquella una catequesis viva, no teórica ni de textos embarazosos, dirigida, como ocurría con los mosaicos de las catedrales en la Edad Media, a personas humildes que no tenían facilidad para acceder a la cultura”. Y añadió la pregonera que, a lo largo de los años, ha ido surgiendo una nómina abundante de buenos escultores con distintos estilos, de los cuales existen muestras en la imaginería de Callosa, “con figuras de gran belleza estética, cuya contemplación estimula nuestra religiosidad”, aprovechando la ocasión para dar la bienvenida a la última incorporación, “la bella imagen de María Santísima de la Victoria”.
Ascensión Palazón afirmó más adelante que “Esta catequesis procesional sigue siendo ahora muy importante. También hoy los cristianos tenemos que sacar nuestra fe a las calles y plazas, ante la progresiva secularización de nuestra sociedad, sobre todo para que los más pequeños vayan asimilando así las distintas etapas de la pasión de Cristo. Recuerdo de mi experiencia de maestra en el colegio, cómo cada uno de aquellos niños y niñas sabían pintar el dibujo del capuchino con los colores de su vesta, con un claro sentimiento de pertenencia a su cofradía”. En otro momento de su intervención, la pregonera señaló que “La vida, pasión y muerte de Jesús, es una fuente de enseñanzas válidas para cualquier colectivo, cristiano o no. Los evangelios no contienen un programa social concreto para erradicar definitivamente la miseria humana de la tierra, pero Jesús pone siempre ante nuestros ojos la realidad de la pobreza y las necesidades de los pobres” y citó al Papa Francisco: “Si quitamos la pobreza del evangelio no se puede entender el mensaje de Jesús”.
Un aspecto novedoso aportado en su discurso por Ascensión Palazón fue la clave femenina respecto a la que dijo: “Existen muchas referencias en los evangelios acerca de la dignificación de la mujer por Jesús, rompiendo numerosos tabúes de sumisión e invisibilidad en aquella época. Nos revela el Evangelio una profunda amistad con las hermanas Marta y María, conversa públicamente con la Samaritana, defiende a una mujer adúltera ante una nutrida concurrencia, se deja tocar y ungir por una prostituta y elogia la fe de la mujer enferma... En sus parábolas aparecen muchas mujeres. Jesús salta por encima de los convencionalismos sociales de su tiempo y jamás se le atribuye nada que pueda resultar lesivo o desconsiderado hacia la mujer, algo insólito para la época. Para Jesús la mujer tiene la misma dignidad que el hombre y por eso funda una comunidad en la que hombres y mujeres viven y viajan juntos y defiende a la mujer cuando es injustamente tratada. Las mujeres fueron los primeros testigos de la Resurrección de Cristo”.
No se olvidó la pregonera en su recorrido de ninguno de los grupos escultóricos que representan la Pasión, Muerte y Resurreción de Cristo pero resaltó como este tratamiento positivo de la mujer en el Evangelio tiene una correspondencia en Callosa de Segura. “En nuestras Cofradías y Hermandades han participado y participan mujeres asumiendo funciones y cargos representativos, animando y colaborando en todas las actividades que conllevan la preparación de procesiones y actos religiosos que llenan nuestra Semana Santa. Acompañan a la Virgen de los Dolores con las hermosas mantillas. Mujeres enlutadas con velo en señal de duelo y tristeza, acompañan con sumo respeto a La Soledad. También, bajo las capuchas de los nazarenos hay muchas mujeres anónimas que acuden a formar parte de los desfiles procesionales”.
Subrayó especialmente Ascensión Palazón el protagonismo que adquiere la mujer en tres cofradías emblemáticas de la Semana Santa callosina -Jesús del Perdón, María Santísima de la Amargura y la Madre del Amor Hermoso- que rompen con los prejuicios negativos como debilidad, incapacidad, fragilidad, etc. e incorporan decididamente mujeres costaleras a sus tronos. “Este hecho, en su momento, supuso una innovación rompedora y, hoy por hoy, los pasos de mujeres costaleras siguen viéndose como una originalidad. El entusiasmo con que asumen su función, el empuje y la resolución con que sus hombros femeninos se aferran a los varales del trono, y la fuerza con que los elevan al cielo, constituyen una de las estampas más bellas de nuestras procesiones y que no deben desaparecer”.
El acto finalizó con la entrega de recuerdos acreditativos de sus respectivos nombramientos a la Pregonera (Ascensión Palazón López), Nazarena de Honor (Asunción Manresa Bernabeu) y Caballero Porta-Estandarte (Francisco Ramón Cayuelas).