Imposible la hais dejado…
Nadie podía señalar la fecha fija en que la situación saltaría por los aires, pero muchos estábamos seguros de que la legislatura no podía terminar como empezó
Quousque tandem abutere, Catilina, patientia nostra? -es decir “¿Hasta cuándo abusarás, Catilina, de nuestra paciencia?” para los no versados en la conjura catilinaria de Roma- era, como aquí se dijo alguna vez, una frase que cuadraba perfectamente en la situación política oriolana de los últimos tiempos. Los múltiples desencuentros, expresados desde el primer momento, de manera taimada unas veces y sin recato público en otras, entre los miembros de un equipo de gobierno de circunstancias trascendía de lo normal hasta terminar convirtiéndose en una batalla diaria. Nadie podía señalar la fecha fija en que la situación saltaría por los aires, pero muchos estábamos seguros de que la legislatura no podía terminar como empezó. Porque aquí, desde hace tiempo, el juego que se venía practicando no era otro que el de ‘susto o muerte’. Un peligroso juego, con los intereses del municipio de por medio, que es lo más sangrante. Y, en el transcurso de los meses, resulta que ha habido muchos sustos, para terminar en muerte.
Un buen amigo me pasa la fotografía de una gran lona colocada junto al Congreso de los Diputados por una conocida firma de frutos secos, que se define como ‘La pipa de la paz’. Pero lo llamativo de esta exitosa campaña publicitaria es el rótulo que ocupa la mayor parte del espacio: “¿Y si os relajáis un poquito y solucionáis los problemas entre todos?”. Arrimando el ascua a su sardina, el inteligente publicista añade: “Las pipas son ricas en magnesio y contribuyen al buen funcionamiento del sistema nervioso. Para que dejéis de lado vuestros intereses partidistas y trabajéis juntos para sacar esto adelante”.
Sinceramente, no creo –la sangre está a punto de llegar al río- que esto sea posible ya en Orihuela donde el ménage à trois que, tiempo ha, se desarrolla para desgracia de los ciudadanos en el meublè de la esquina del Pavo tiene siempre una misma meretriz y lo único que cambian son los amantes. Rebobinen ustedes, si quieren, y verán…
Por otra parte, el drama que vive el municipio oriolano me ha recordado otro (en este caso romántico, religioso-fantástico). En el acto cuarto de Don Juan Tenorio, titulado “El diablo a las puertas del cielo”, José Zorrilla sitúa la escena en la “Quinta de don Juan Tenorio cerca de Sevilla y sobre el Guadalquivir. Balcón en el fondo. Dos puertas a cada lado”. Debaten Don Juan y Don Luis Mejía:
Don Juan: (…) Y por mostraros mejor mi generosa hidalguía, decid si aún puedo, Mejía. Leal la apuesta os gané; mas si tanto os ha escocido, mirad si hayáis conocido remedio, y le aplicaré.
Don Luis: No hay más que el que os he propuesto, don Juan. Me habéis maniatado y habéis la casa asaltado, usurpándome mi puesto; pues el mío tomasteis para triunfar de doña Ana, no sois vos, don Juan, quien gana, porque por otro jugasteis.
Don Juan: Ardides del juego son.
Don Luis: Pues no os los quiero pasar, y por ellos a jugar vamos ahora el corazón.
Don Juan: ¿Le arriesgáis, pues, en revancha de doña Ana de Pantoja?
Don Luis: Sí, y lo que tardo me enoja en lavar tan fea mancha. Don Juan, yo la amaba, sí, mas, con lo que habéis osado, imposible la hais dejado para vos y para mí.
Me niego a aceptar el maleficio a que estamos sometidos los oriolanos desde hace mucho tiempo. Así es que alguien -o algunos- tendrá, a partir de mañana, la responsabilidad de tratar de sacar a Orihuela de esta grave crisis que ha afectado grandemente durante mucho tiempo a su reputación institucional. Por eso, es oportuno en este día echar mano nuevamente de aquel texto publicado a principios de 1895 en el periódico oriolano La Noticia Diaria que se titulaba “Orcelis desplumata (Canto del Oriol)" y empezaba así:
Hijos de la Armengola
que en vuestros verdes años
al salón de trifulcas
dirigís vuestros pasos.
Alzad, alzad la vista
y contemplad a un pájaro
que antes era de Oro
y ahora está des-dorado.
Y concluía así esta composición que hoy cobra rabiosa actualidad:
Con que, hijos de mi alma,
ved si esto tiene apaño,
si no por la presente
al menos para Mayo.
Ya lo arregle D. Trino
ya lo arregle D. Paco
ya lo arregle D. Pepe
o lo arregle el diablo;
porque me da lo mismo
si al fin queda arreglado.
- S.- 1. Si el grupo municipal del PP hubiera puesto durante el comienzo de legislatura el mismo interés en sacar los asuntos pendientes como ha hecho desde que les presentaron la moción de censura, otro gallo nos hubiera cantado…Debería decaer esta que se debate el día de San Vicente, aunque solo fuera para ver si son capaces de mantener el intenso ritmo hasta final de legislatura.
- En cuanto al vídeo que circula por ahí de Carolina Gracia en campaña, hablando “alto y claro” de que el anterior cabeza de lista de Cs (hoy diputado López-Bas) estaba en manos del empresario Alcántara que era quien financiaba el partido y demás, cabe aplicarle aquella frase atribuida a Mahatma Gandhi: “Somos dueños de nuestros silencios y esclavos de nuestras palabras”. Por cierto, me cuentan que el vídeo en cuestión ha desaparecido del archivo de uno de los grupos firmantes de la moción de censura.
- Cs -en descomposición- no debe perder ni un minuto en tramitar un expediente de expulsión para su actual grupo en Orihuela. Sencillamente porque les da igual: ellos concurrirán a las próximas elecciones bajo su antigua marca CLR.
- Cobra actualidad un artículo publicado en el Diario de la Vega el 26 de diciembre de 2013 por la entonces primera teniente de alcalde socialista en el Ayuntamiento de Orihuela, Antonia Moreno (hoy delegada en Alicante de Presidencia de la Generalitat). Se titulaba “Ahora me toca a mí”. Deben leerlo porque no tiene desperdicio. Pero les anticipo esta perla: “El viernes 20 de diciembre el empresario José Alcántara subió personalmente al despacho del Secretario del Ayuntamiento para certificar la validez de la moción de censura que se prestó minutos después en el Registro General. José Alcántara es el dueño de un partido político, el Centro Liberal Renovador (CLR). Dueño en toda la extensión de la palabra. Dueño de las siglas, dueño de los concejales y dueño de las decisiones que toman”. Les recomiendo su lectura íntegra…si están vacunados contra la pornopolítica, claro.