En Villena gobierna el PSOE, pero mandan, enredan e imponen Los Verdes
El alcalde Fulgencio Cerdán es incapaz de imponer su criterio por su obsesión en defender la alcaldía, a pesar de sentencias en contra y elevadas multas judiciales que pagan los villeneros
La comisión de gobierno del Ayuntamiento de Villena ha rechazado la solicitud presentada por el empresario Manuel Carrillo para organizar un festejo taurino en la bonita plaza cubierta de la ciudad, coincidiendo con las fiestas patronales del próximo mes de septiembre. El acuerdo se adoptó por el voto en contra de los dos concejales de Los Verdes a ceder la plaza y la abstención de los ediles socialistas, con el alcalde a la cabeza, y en único voto positivo del concejal del PP. Este resultado confirmaba la actitud negativa que desde que la izquierda llegó al ayuntamiento villenero mantiene contra la cesión del coso taurino para celebrar festejos de esta naturaleza, a pesar de sentencias en contra y elevadas multas judiciales que, como siempre, pagan los villeneros. Asimismo, ratifica el poder del grupo de ediles de Los Verdes, que es, en definitiva, quien manda, controla, impone y enreda en la bella ciudad del Valle del Vinalopó. Eso sí, con el visto bueno del alcalde Fulgencio José Cerdán Barceló.
No se puede mantener esa actitud tan cobarde de abstenerse. O se está a favor o se está en contra
Se repite la historia en Villena, aunque no me debería sorprender porque allá por el mes de noviembre del pasado año, en la bellísima iglesia de Santiago, una de las más bellas de España y un segundo ´tesoro de Villena´, el alcalde Fulgencio Cerdá Barceló, en presencia del secretario municipal, me confirmaría personalmente que mientras dependiera del voto de Los Verdes para sacar adelante asuntos municipales, nunca autorizaría corridas de toros en la plaza de Villena. Lo hizo durante la presentación del libro ´Religions for Peace´, editado por el industrial villenero Julio Guillén, quien semanas antes había presentado dicho libro, una auténtica obra de arte, al Papa Francisco en una audiencia en El Vaticano. Mi pregunta, tanto a Cerdán Barceló como al secretario municipal, fue directa; ´ ¿habrá toros en Villena?´. No, fue la respuesta.
Llegado a este punto, no hay más remedio que recordar la soberbia que se encerraba en las palabras de la entonces edil Esther Esquembre, de Los Verdes, que dimitió en abril de este año, cuando repetía una y otra vez que en Villena no habría corridas de toros mientras ella tuviera en sus manos a los socialistas y a su alcalde, Fulgencio Cerdán, sometidos a su tiranía. Y lo ha cumplido al pie de la letra porque a la primera autoridad de Villena siempre le ha faltado dar un golpe en su mesa de primera autoridad municipal y decir fuerte, aquí mando yo, cambiar delegaciones, sustituir concejalias, anular subvenciones y prebendas por estar en esta o aquella comisión. En definitiva, tocarles los bolsillos a los concejales de Los Verdes porque es ahí donde más les duele. Ni ecologismo ni animalismo en sus amplias acepciones. El bolsillo es el que manda y es ahí donde Fulgencio Cerdán tiene una baza importante para no dejarse manejar como lo están haciendo. No se puede mantener esa actitud tan cobarde de abstenerse. O se está a favor o se está en contra. Pero no se puede ser carne y pescado a la vez. Villena es una tierra de gente noble, sincera, trabajadora, con unas fiestas de Moros y Cristianos que son envidia en toda España, una tierra que quiere toros el 7 de septiembre, el día grande de sus festejos, como lo demuestra los llenos que todos los años ha habido en tan señalado día en el coso cubierto, con peñas y comparsas llenando los tendidos. Pero Los Verdes y un alcalde temeroso de perder su sillón se niegan a que todos tengamos la fiesta en paz.