Necrológica
Cuando una sociedad gasta su dinero en informar de la muerte de un familiar, merece un respeto, no por el dinero sino por la actitud
Cuando en los años setenta colaboraba en Radio Alicante, el administrativo de publicidad colocaba, en el estudio de continuidad, unas hojas con las necrológicas a radiar ese día. Los deudos entendían que la sociedad debía estar informada de las defunciones.
Ignaci (sic) Bellido, antiguo militante de Unión Valenciana, ha tenido la sensacional idea de promover una moción al pleno del Ayuntamiento de Alicante para “instalar paneles solares y fotovoltaicos en los nichos del cementerio municipal Nuestra Señora del Remedio”.
Bellido, oteó el futuro y se le encogió el alma. Eliminada la del baile, la que ha echado una manta térmica en el proceso a su marido durante el juicio por abusos a una menor que tenía la Generalitat el santo deber de tutelarla, y que afirmaba que los jueces, la derecha, la izquierda de la derecha y la derecha de la derecha, en definitiva aquella canción denominada la “Yenka” izquierda derecha un dos tres!, Mónica Oltra, sigo, Ignaci vio peligrar su futuro y claro, el futuro es “muy oscuro trabajando en el carbón”, pero para este personaje el futuro es muy oscuro… trabajando. Por ello oteó el horizonte para desencoger su alma y encontró un clavo ardiendo, un cabo en medio de la tormenta: El programa RIP de su conmilitón Juan Ribó a la sazón alcalde ciclista de Valencia y prevaricador en el tema de la contrata de su cuñado en la EMT.
Ribó, perito agrícola, harto de escardar cebollinos, se dedicó a la política mediante la vía rápida del valenciano. Fieles a la recomendación del salvador Eliseo Climent y siguiendo su divina enseñanza, comenzó a nadar entre las subvenciones que provenían de Cataluña y las que Juan Lerma abonaba a la borregada nacionalista.
Bellido que por esas épocas abrevaba en los establos de Unión Valenciana, ha visto en Ribó su “maroma salvadora” y se ha puesto como buen monaguillo a hacer méritos. Recuerdo la anécdota que contaba el cura al ver al monaguillo contento tocando las campanas por la muerte del Papa, “Padre, sube el escalafón y algo me tocará” y eso pensó Bellido.
Entiendo que habrá muchos familiares que les moleste que coloquen unas placas en el tejado de la vivienda de su bien amado finado
Nos sale el payo con la idea de llevar al pleno del Ayuntamiento una moción para instalar paneles fotovoltaicos en los nichos del Cementerio.
Cuando una sociedad gasta su dinero en informar de la muerte de un familiar, merece un respeto, no por el dinero sino por la actitud. Hay tumbas y nichos en propiedad y entiendo que habrá muchos familiares que les moleste que coloquen unas placas en el tejado de la vivienda de su bien amado finado. Pero a este personaje le tiene igual puesto que su único fin es quedar bien con el canónigo como buen monaguillo, y beberse el vino de la consagración a espaldas del mismo.
Creo que poner placas fotovoltaícas en el cementerio es una memez, una gilipollez y una “meada fuera de tiesto”. Desconozco la superficie de los nichos del cementerio Nuestra Señora del Remedio, pero estoy seguro que es infinitamente menor que la superficie de los tejados de todos los colegios públicos que tiene el Ayuntamiento la obligación de mantener. Un convenio con la consejería de educación de la Generalidad Valenciana que recoja las obligaciones de ambas partes y todos los colegios disfrutarán de energía barata y limpia. Pero para ello hay que pensar y Bellido, homocigótico mental, piensa únicamente en su futuro y la energía, el medioambiente, la sostenibilidad y la solidaridad le importan un pitoflauta, su único objetivo es recolocarse “el que no esté colocado que se coloque” afirmaba Tierno, en el proceloso mar que se acerca y que le puede devolver al paro de donde nunca debió salir por el bien de Alicante. En el fondo pagarle el paro es barato.
comunidad-valenciana/alicante
Compromís propone instalar placas solares… ¡en los nichos del cementerio!