Un invidente paga por error 930€ por bizum y ahora le niegan la devolución

Un hombre ciego ha denunciado al dueño de un bar que se niega a devolverle el importe que pagó de más por error. Al querer remitir los 9,30 euros de la cuenta no se percató de que enviaba 930, y aceptó la operación, confirmando la trasferencia del dinero por la aplicación bizzum.

El hombre quiso abonar la cuenta con tarjeta de crédito, pero no le funcionaba, por lo que optó por pagar a través de la aplicación bizzum, sin percatarse de que no puso la coma detrás del nueve, lo que elevó el importe a casi mil euros. El propietario del bar le confirmó la recepción del importe sin advertirle del error, por lo que el perjudicado no se dio cuenta hasta dos días más tarde. Cuando se acercó al establecimiento a reclamar la devolución el propietario le dijo que se lo devolvería cuando el juez lo ordenase. El juicio está previsto para el próximo 11 de noviembre.

Los hechos ocurrieron hace unos días en un bar de Petrer al que la víctima acudía con cierta regularidad. El propietario del establecimiento argumenta que ya no dispone del dinero, al haber sido utilizado para saldar una deuda bancaria. Tras personarse en el bar dos agentes de la Policía Nacional el hombre admitió los hechos y afirmó que, por recomendación de su abogada, esperará a que el juez ordene la devolución para hacer efectivo el reembolso.

Importe máximo por bizzum

La mayoría de los bancos permiten que se pueda pagar hasta 1.000 euros en una única operación, y hasta un máximo de 2.500€ al día. Otros solo dejan que se transfieran hasta 500€. Lo más recomendable es que un titular de la cuenta con algún grado de vulnerabilidad ponga un límite bajo a las operaciones bancarias, para evitar estafas o manipulaciones.

Móvil para personas ciegas

Las personas con discapacidad visual o con ceguera utilizan teléfonos móviles con aplicaciones adaptadas para que puedan ser utilizadas por ellos., Generalmente funcionan con órdenes dadas por voz, personalizada previamente al tono de la persona propietaria del terminal.

La aplicación repite la orden dada, por lo que quien manipula el teléfono tiene la opción de corregir la orden. En el caso que ocupa esta noticia se desconoce el método utilizado por este hombre para dar la orden a su terminal, aunque podría haber sido deletreando la cifra, a la que, por error, no le habría indicado la coma.