España, mercadillo de saldos
Feliz fin de semana, agosto entró en nuestras vidas y se ha apropiado de estos días, en los que una mayoría de la ciudadanía pretende descansar. Ya les digo que la semana de "La Virgen", será una semana de descanso total, salvo para la hostelería y cualquier negocio dependiente del turismo, salvo que suceda algo extraño, pero mis décadas de vida me han demostrado que suelen ser los siete días más inoperativos del año.
Cuando Felisa, una vecina de mi barrio, llegó a Alicante, aun era una niña, soñaba con seguir tomando espetos en verano, como lo hacía en su Málaga natal. Creció con esa añoranza, hasta que la edad y la situación económica, le permitieron acercarse, de vez en cuando, a los chiringuitos malagueños, a disfrutar de ese manjar único en el Mundo. Cuando hablo con ella, no me expresa nostalgia, porque ha sabido adaptarse a estas tierras alicantinas y, después, convertirse en alicantina. Hoy hace unos arroces alicantinos equivalentes al manjar que suponen los espetos malagueños.
Felisa sabe de vender, pero de vender en mercadillos, que es una de las ventas más directas y "agresivas" que uno puede realizar. Con mucha gracia ella explica que no convence al cliente, que lo obliga, que es más bonito.
Felisa ha enviado una carta al Presidente, para explicarle que ella puede ayudar en estos momentos tan complicados, porque ella sabe vender "saldos" y eso es lo que ahora tiene que hacer Sánchez, ir entregando los saldos que quedan, al precio de unos votos para que lo hagan Presidente de nuevo.
Felisa me cuenta esto porque ha parado a tomar un café con leche, en unos minutos de descanso, antes de volver a la guerra de la venta. Ella ve muy bien que Sánchez siga siendo el que mande en España, le parece que ayuda mucho más que otros, que reparte mucho dinero, estés como estés, lo hace a los jóvenes, a los mayores, a los que no tienen trabajo, a los inmigrantes... Ella dice que es un sabio que ha sabido crear dinero donde no había, ha oído hablar de miles de millones. "Y los ha conseguido él, viajando y viéndose con los europeos".
Felisa es la imagen clara de la mayoría de los que han votado convencidos y sin ninguna mala intención, al PSOE. Felisa no piensa en la extrema derecha, Felisa piensa en que nunca le va a pasar nada, porque siempre habrá una paga que le podrán dar, porque según ella, "reparten dinero para todos y eso es muy bueno".
Felisa tiene la cara de una española cualquiera y viste con vaqueros y una camisa suelta, escogida para hacer una buena combinación, una ropa que podría llevar cualquiera de las personas que conocemos, tiene una cultura media, se esfuerza en su trabajo todos los días. Felisa se levanta temprano, madruga, tiene hijos, ya creciditos y le preocupa el futuro, por eso quiere un Presidente que les asegure que les va a dar dinero, si les pasa algo.
Vuelve a su trabajo, feliz, porque le gusta vender lo que tiene y si hay saldos, también le gusta venderlos, con más intención, como el Presidente.
Tras despedirla con una sonrisa, me voy pensativo y tengo la duda de si a mí también me convendría que Sánchez continuara siendo Presidente. El panorama es que le va a dar concesiones a los Catalanes y a los Vascos, pero eso en qué va a influir en mi futuro. ¿Qué va a cambiar en España? Pero si España ya está cambiada. Ayer me enteré que, en contra de lo que dice nuestra Constitución, nuestra Vicepresidenta, la "Yolandesa del Pueblo", ha decidido que "... somos un país de países". Lo dice ella y eso irá a Misa... bueno a Misa no que ella no quiere nada con la Iglesia.
La "maquinaria de Moncloa" tiene claro que va a formar gobierno vendiendo España a trozos, a cada uno lo que pida, pero Sánchez será Presidente.
Del otro lado Feijóo, es el ganador de nada, que cada día presenta una relación más bronca con VOX, porque ninguno de los dos, ni PP, ni VOX, entiende lo que querían los españoles y lo que tenían que haber puesto encima de la mesa.
En todo este mapa de la Derecha, sólo hay una persona que tiene claro cómo hacer política y atraer, cada día, a más votantes. Sólo una persona es capaz de hablar con claridad y determinación y no tener dudas en cada afirmación. Ustedes y yo sabemos quien es, hoy no la tenemos como opción, pero un día, probablemente será la solución.
Estamos en época de los mejores pescados. Les aconsejo el bonito del norte y para conservar todas sus características, les sugeriría que lo cocinaran al modo japonés, hagan un tataki de bonito. Disfrutarán de un pescado único del que percibiremos todos los matices al llegar a su interior crudo. No se olviden de celebrar el momento con algún "Godello" humilde, no hay necesidad de irse a un vino carísimo, los hay muy asequibles y de excelente elaboración.
No se olviden que nadie puede dar lo que no tiene, así que si quieren repartir felicidad han de procurarla en su interior, primero.
Como siempre, servidor de ustedes... Sergio Morales Parra