El agua ya está calentita
Feliz fin de semana, feliz descanso. Muchos de ustedes están disfrutando de ese puente que siempre nos entrega octubre. Este año también ha caído bien, por un lado el 9 de Octubre, día de nuestra Comunidad Valenciana, que cayó en lunes y el 12 de octubre día de la Hispanidad, día del "Pilar", que permitió el puente del viernes. Así que esta Comunidad Valenciana ha tenido un par de "prudentes" días de trabajo efectivo, el martes y el miércoles. Los que sí han trabajado todos los días son los trabajadores de la hostelería, esos que están pendientes de usted y de mí, cuando descansamos y nos vamos a disfrutar. Mi rendido homenaje para ellos.
Mi amigo Luján, un entendido en "metáforas" de nuestra vida común, un gran orador para equipos de trabajo, un "maestro" para mejorar nuestros días, me contaba el cuento de la rana a la que meten en una olla de agua fría, pero que ponen al fuego y poco a poco se va calentando el agua, sin que la pobre rana sea consciente de que la están cociendo, hasta que finalmente pierde la vida, de forma casi inconsciente. No sé si eso puede ser así, no me he puesto en la piel de una rana nunca, pero el símil es bastante acertado con la situación actual de la política española, o más bien, de la política que hace este Sánchez que nos "apasiona" a todos.
Del "Estoy diciendo que con Bildu no vamos a pactar... si quiere lo digo cinco veces", también hemos pasado a sentarse esta semana con ellos
Del "es indecente que un político indulte a otro político", hemos pasado a los indultos descarados a protagonistas del 1-O.
Del "lo que se produjo en el Parlamento de Cataluña se puede entender como un delito de Rebelión", hemos pasado a "lijar" y "suavizar" delitos que tengan que ver con los movimientos de los políticos catalanes, la rebelión, la malversación, etc. Todo lo que suponga que les puedan caer penas.
Del "no sería bueno para España pactar con los independentistas", hemos pasado a que sean unos socios imprescindibles.
Del "Estoy diciendo que con Bildu no vamos a pactar... si quiere lo digo cinco veces", también hemos pasado a sentarse esta semana con ellos, para pactar su apoyo para la nueva legislatura. Lo duro es que le sonríe y le da la mano a la persona que indicaba a los asesinos de ETA a quién debían dar el siguiente tiro en la nunca, algunos de ellos miembros del PSOE. Hay que tener estómago para hacer esto.
Así podríamos hablar de decenas de contradicciones que nuestro Presidente, ha ido llevando hasta nuestro panorama político, conforme íbamos, los españoles, asimilando la última cometida.
Todo esto es porque el agua ya está calentita, así que prepárense al último hervor, un golpe de calor que nos llegará con la "Amnistía", en formato de Ley para la estabilidad democrática o algo similar. Esa enorme mentira en la que nos meterán para que él, Sánchez, siga siendo Presidente.
Y dice mi amigo Luján que se aplicará la Ley, como se aplicaron los indultos, y que no pasará nada, que sólo tenemos que prestar atención a todo aquello que diga el Presidente que no hará nunca, para conocer cuál es su siguiente paso. Lo hará, además, con todos sus palmeros conformes, que para eso los ha escogido, y con la aquiescencia de los españoles, que para eso, se ve que para eso, le hemos votado. Dice mi amigo Luján que ninguno de los votantes del PSOE vomitará viendo la foto de Sánchez sonriente, dando la mano a los que asesinaban a otros compañeros, porque nos han hecho creer que eso es un síntoma de normalidad democrática.
Luján y yo discrepamos en muy pocas cosas políticas, en las profesionales sí que tenemos otros puntos de vista, pero en las políticas somos coincidentes en casi todas. Yo lo animo a escribir un libro en el que mezcle esa sabiduría que expone en sus charlas aplicadas a la empresa y su análisis político de la actualidad. Un día me hará caso.
Luján es un hombre de esos que ha conservado el "tipito" a base de no comer pan y salir a correr casi todos los días. Luján come carne determinados días a la semana, pero la pesa antes de comer, no la mezcla con aceite, la hace a la plancha, come mucha fruta y verdura, no bebe alcohol y considera que el embutido es un riesgo para nuestro cuerpo. Con Luján no quedo para comer, no se ha dado nunca la posibilidad. Me di cuenta que no era el camino hace décadas, cuando lo invité a que tomáramos algo y el primer plato de jamón me lo tuve que comer yo solo, Luján no come jamón. Entonces me di cuenta de que nuestra amistad iba a tener mucho que ver con los paseos, la conversación y el intercambio "epistolar", pero ha merecido la pena, los años han dejado una amistad sincera sin adornos gastronómicos.
Mi amigo me ha hecho esta mañana una disertación sobre la Corona, la aparición de la Princesa Leonor, su atuendo militar y veinte mil detalles más que soy incapaz de repetir y que además les aburriría a ustedes con una "disección" profesional del acto y sus repercusiones. Luján es así, sabe mucho de estas cosas. Yo les resumo lo que a mí me pareció, en dos palabras: "ME GUSTÓ". ¿Por qué? Pues debe ser por lo mismo que soy del Real Madrid, aunque haya partidos que mejor se hubieran jugado en los vestuarios.
Como ya tengo una edad, no me cuesta decir que me gustó. Me gustó la parte "castrense" y me gustó la parte civil, cuando esos padres miraron a su hija al saludar a uno de sus compañeros en el "besamanos" de palacio. Que aprovecho para decir que deberían quitarle nombre de "besamanos" y llamarle "ledoylamano", "saludamanos", "estrechamanos", algo más acorde con el acto de nuestros días, se lo dejo a los académicos para que escojan el título.
Los que somos padres y hemos visto crecer a nuestros hijos, somos conscientes del orgullo que los Reyes pueden tener al ver a su hija en el cumplimiento de sus obligaciones. Mis hijos también cumplen con obligaciones, no castrenses ni nada parecido, pero obligaciones laborales y sociales y cuando los veo y los reconozco en su cumplimiento... "me llena de orgullo y satisfacción". Así somos los padres.
La actualidad nos ha traído la desastrosa noticia de los enfrentamientos en la franja de Gaza y en el Líbano. A la pena que nos produce ver que mueren personas a manos de unos "gerifaltes" que piensan más en ellos que en las vidas que se pierden, en este caso, se une la preocupación por españoles que tenemos allí, civiles y militares, con mención especial a uno, un militar, al que he conocido prácticamente desde su nacimiento, con el que nos une, a mi familia y a mí, una estrecha relación "familiar", y que creo que, cuando lo vea volver dentro de unas semanas, le tendré que llamar D. Juan, se lo ha ganado. Como no puedo hacer otra cosa, rezo por él y por todos los que allí están.
Me despido de Luján porque quiero pasar por el mercado a comprar algunas viandas. Luján se marcha a preparar algunas propuestas para seguir impartiendo su sabiduría en las empresas. Esta semana le tocará ir al Norte de España, donde ya se notará la llegada del otoño. Todos estamos deseando pasar algo de frío y sentir el agua de la lluvia, porque parece que nos faltara algo. Yo voy a intentar aprovechar para darme algún bañito en la playa, que el tiempo nos lo sigue permitiendo todavía.
Descansen, descubran algo nuevo y entréguense a amar, si lo consiguen, habrán tenido un fin de semana completo.
Como siempre, servidor de ustedes... Sergio Morales Parra.