FIESTAS
Josep Vicent y Miguel Soro homenajean los 38 años de historia del Castell de l'Olla de Altea
El Castell "se puede ver sin mirar al cielo, nace del mar, se dibuja sobre el mar, se refleja en el mar, ilumina el mar, se disuelve en la sombra del mar.
La presentación del cartel y del pregón de la 36ª edición del Castell de l'Olla ha homenajeado en esta ocasión al barrio de la Olla, a la labor de sus fundadores y al elenco de colaboradores anónimos. Así, tanto el cartel diseñado por Miguel El Soro como el pregón del músico alteano Josep Vicente triunfaron entre los asistentes congregados en ls Era del Cranc con una puesta en valor de los 38 años de historia del Castell.
El presidente de la Cofradía del Castell de l'Olla, Jose Pérez Gorgoll, ha resaltado que "no se puede mejorar un día tan especial como la presentación del cartel y el pregón". "Ha sido una jornada perfecta, llena de emociones, llena de amor a la Vila de Altea gracias a la aportación de dos referentes internacionales en el campo de la música y las bellas artes", ha declarado.
Asimismo, ha destacado el "cada vez más importante" apoyo de las instituciones públicas y privadas que entienden que el Castell de l'Olla es "un icono universal nacido en Altea para su proyección mundial, no solo del Castell, sino también de la costa Blanca".
"Hacemos posible que la marca Alicante llegue a todo el planeta y Ha sido un verdadero el lujo de contar con Josep Vicent y Miguel Soro con sendos pregón y cartel que han plasmado la esencia de la fiesta de la pólvora y el mar en toda su plenitud", ha remarcado Pérez Gorgoll, según ha indicado la Cofradía del Castell de l'Olla en un comunicado.
Josep Vicent ha subrayado que "por estas aguas llegaron los fenicios, los griegos, los cartagineses, los romanos, los musulmanes...tierras de aluvión, de mestizaje, de invasores asimilados por sus vencidos, de mezcla de etnias y religiones...". "Y todos llevamos muy dentro el amor por la pólvora, por los fuegos", ha expresado.
"He visto fuegos artificiales en muchos lugares...y hace ya tiempo comprendí que el complemento ideal del fuego es el agua. En la Concha de San Sebastián, el Carnaval de Venecia...Pero lo de Altea es otra cosa, una fiesta popular, amistosa, vivida entrañablemente por todos", ha continuado.
En este sentido, ha hecho hincapié en que el Castell de L'Olla "se puede ver sin mirar al cielo, nace del mar, se dibuja sobre el mar, se refleja en el mar, ilumina el mar, se disuelve en la sombra del mar. Como la vida de estos hombres y mujeres". "Justament eixa germanor és la que dona sentit al Castell de l'Olla", ha asegurado.
Por su parte, Miguel Soro ha afirmado que "ha querido plasmar el trabajo de los cofrades y amigos del Castell de l'Olla durante todo el año, su esfuerzo para que todo salga bien". "Y al mismo tiempo he reflejado la iconografía esencial de Castell: la luna y su reflejo en el mar, las plataformas de disparo, el público feliz, los miembros históricos de la cofradía, la illeta y la explosión de luz y color de la noche de altea iluminada por la magia de la pólvora", ha agregado.
Altea, "destino de excelencia
El alcalde de Altea, Jaume Llinares, ha ensalzado "lo mejor de la vila blanca": "Sus artistas, sus fiestas, sus tradiciones, la ingente labor de la cofradía a la que el Ayuntamiento manifiesta su gran afecto, consideración y respeto por difundir nuestro municipio y darle una dimensión internacional como destino de excelencia".
Por último, Nicolás Bugeda, en representación de la Generalitat Valenciana, ha agradecido la colaboración institucional del consistorio alteano, la Diputación de Alicante y su patronato Costa Blanca, la Conselleria de Turismo, así como la iniciativa privada a modo de patrocinadores presentes en el acto.
Mérito turístico de oro
El Castell de l'Olla está reconocido como 'Mérito Turístico en la categoría de Oro' de la edición de 1999 por la Diputación de Alicante y en el año 2007 fue declarada 'Fiesta de Interés Turístico Comunitat Valenciana' de la Generalitat así como Importante del periódico Información de Alicante.
Igualmente, fue calificado por el Consell Valencià de Cultura como 'Bien Etnográfico de Interés Cultural'. En 2016, con motivo del 30 aniversario, tuvo el reconocimiento de Centro Unesco Mediterráneo, a través de la Comisión Española de este organismo internacional, que reconoció los valores de "la protección universal de las manifestaciones humanas en materia de la preservación de patrimonio etnológico e inmaterial de nuestra Comunidad".