Alicante se querella contra el ifluencer Nil Ojeda

“Halla al profesional del socorro, ponte delante y comienza a actuar: al suelo, ahogado fuera del agua. Si mereces, el premio te dará”, así rezaba el enigma lanzado por el influencer, Nil Ojeda, que le podría costar el cierre de sus redes sociales en la que tiene alrededor de cuatro millones de seguidores. El Ayuntamiento de Alicante ha presentado ante fiscalía una denuncia contra el conocido youtuber por animar a la gente a fingir ahogamientos en el marco de una campaña de marketing de su marca de ropa 'Milfshakes'. El consistorio pide el cierre de las redes sociales de Ojeda e iniciará un expediente sancionador por infracciones administrativas, tanto a nivel autonómico, como municipal, en virtud al incumplimiento de la ley de espectáculos y la ordenanza municipal, solicitando las sanciones correspondientes.

El objetivo de esta campaña era promocionar el drop 14, una pieza exclusiva, de la marca del influencer. Tras ver la repercusión que había tenido este reto que Nil Ojeda lanzaba a sus seguidores, obligando a que los socorristas dejaran desatendidos sus puestos de vigilancia debido a la gente que estaba fingiendo ahogamientos en las playas de San Juan y El Postiguet, el gobierno municipal puso este caso en las manos de sus servicios jurídicos que han concluido que la actuación puede ser constitutiva de un delito de simulación de peligro (Artículo 561 del Código Penal), ya que provocó la movilización de los servicios de emergencia de manera injustificada.

En la denuncia el consistorio instará al ministerio público a cerrar las redes sociales y los abogados también creen que lo ocurrido viola la Ley 14/2010 de Espectáculos Públicos de la Comunitat Valenciana, al organizar un evento que compromete la seguridad pública sin las debidas autorizaciones, así como la ordenanza de convivencia cívica de Alicante, que regula la libre circulación y prohíbe actividades que pongan en peligro la seguridad en espacios públicos.

Del mismo modo, los servicios jurídicos estiman que el reto podría violar la Ley 13/2022, conocida como la “ley influencer”, al promover un acto que puede incitar a la comisión de un delito, lo que está prohibido en comunicaciones audiovisuales. Por lo tanto, además del cierre de sus redes, el Ayuntamiento también está estudiando las posibles sanciones económicas que reclamará al influencer por llevar a cabo dicha acción.