Detenido un menor acusado de hacer gestos racistas a un jugador del Atlético B en el Rico Pérez
Se estudian sanciones a otras dos personas que invadieron el campo y lanzaron objetos a los jugadores
Extracto de imagen de la retransmisión del Hércules CF-Atlético de Madrid B en RFEF TV
La Policía Nacional detiene en Alicante a un menor de 17 años por su presunta implicación en un incidente ocurrido durante el partido de fútbol del pasado 26 de octubre entre el Hércules CF y el Atlético de Madrid B. Según la Policía, el joven habría realizado "gestos ofensivos" que podría interpretarse en relación con el origen racial de un jugador del equipo madrileño visitante. Ya se encuentra en libertad bajo condición de investigado.
A este incidente se le sumó la conducta de otras dos personas que también podrían estar involucradas con malos comportamientos dentro del estadio. Supuestamente una de ellas invadió el terreno de juego y otra lanzó un objeto pequeño que impactó a uno de los jugadores, ha informado la Jefatura en un comunicado.
La Policía Nacional detuvo al menor, identificado con la colaboración del propio Hércules CF, y fue puesto en libertad bajo condición de investigado. Los otros dos involucrados fueron propuestos para sanción, según contempla la Ley del Deporte.
Las actuaciones policiales realizadas con el joven de 17 años han sido remitidas a la Fiscalía de Menores de la Audiencia Provincial de Alicante y a la Fiscalía Provincial especializada en delitos de odio.
La Policía Nacional ha recordado que las conductas ofensivas o discriminatorias basadas en la raza, religión, orientación sexual o cualquier otro motivo que atente contra la dignidad de las personas están tipificadas en el Código Penal y pueden constituir delitos de odio.
Estos ilícitos no solo afectan a la víctima directa, sino que también repercuten en el bienestar de la sociedad, por lo que crean un clima de hostilidad y división, ha informado el cuerpo policial.
La Policía Nacional ha instado a la ciudadanía a "rechazar y denunciar" cualquier acto de odio o discriminación y a "promover" el respeto y la convivencia en todos los ámbitos.
Cualquier incidente de esta naturaleza puede ser denunciado a través de los canales oficiales de la Policía Nacional, donde será tratado "con confidencialidad y un alto grado de profesionalidad", ha concluido.