Toque de atención de Albert Rivera a Fernando Giner
El apoyo de última hora de C's a la manifestación del 18-N molesta en la sede central barcelonesa.
Fernando Giner (c) con Toni Cantó y Mari Carmen Sánchez a los lados.
Ciudadanos nació en Cataluña como fuerza política claramente opuesta al nacionalismo que ha derivado en el independentismo que ha proclamado una efímera república. Y Albert Rivera ha llegado a ser el líder de la cuarta formación política de este país gracias a ello.
Por eso no se ha entendido nada bien en la sede central (barcelonesa) de la formación naranja el reciente cambio de actitud de su filial valenciana respecto de la manifestación por la financiación justa para la Comunidad convocada para el 18N.
La iniciativa de la marcha es sindical, y el apoyo fundamental, el del Botànic. Y aunque luego hayan sido muchos los que se han adherido a la convocatoria (entre los que está la patronal CEV con quien el PP mantiene relaciones mejorables, pero también entidades catalanistas vinculadas a la CUP como Poble Lliure), en la central de Ciudadanos ha molestado que Fernando Giner haya cambiado de actitud con la excusa de que “si el pueblo valenciano va a estar en la calle, nosotros estaremos en la calle”. Los medios de comunicación independentistas apluden el cambio de opinión de C's.
Giner aúna tres responsabilidades que el día a día se encarga a menudo de revelar difícilmente compatibles: la de miembro del sanedrín nacional del partido (con constantes desplazamientos a Barcelona y Madrid), la de portavoz de C's en la Comunidad Valenciana (en detrimento de su portavoz en Cortes), y la de líder de la oposición en el Ayuntamiento de Valencia. En ésta última labor, que es fundamental si se quiere conseguir no sólo la alcaldía sino votos determinantes para las Autonómicas, es en donde más críticas cosecha Giner por considerarse de manera generalizada que está dejando escapar una gran oportunidad frente a las constantes luchas internas del tripartito de izquierdas.
El intento de C's-Valencia por desmarcarse a toda costa del PP (que ha anunciado con reiteración que no marchará el 18-N) para lograr un nítido nicho de mecado electoral ha alertado a los responsables del partido en Barcelona “porque así empezaron en Cataluña”.