Los valencianos en la guerra de la independencia
El total de valencianos que llegaron a luchar en esta guerra fue de 81.000 personas aproximadamente, lo que equivalía a un 10% aproximadamente de la población de todo el Reino de Valencia.
La guerra de independencia española es uno de los hechos históricos mas recordados de la historia de España. Grandes gestas como Bailén o Cádiz son conmemoradas todos los años.
Los valencianos pusieron un gran capital humano durante el conflicto. Estudiando los informes que sacó la junta de Valencia durante 1808 podríamos estimar que entre el 25 de mayo (fecha en que se proclama la Junta de Valencia) y el 28 de junio, donde tenemos su primera gran batalla frente a las Torres de Quart, la Junta disponía en todo el Reino de Valencia de 9.800 soldados de infantería y de un regimiento de caballería que no especifica número.
En 1809, que fue el año de mayor actividad para la Junta, y a principios de 1810, la junta valenciana llegó a disponer para el ejército español que luchaba en el centro de la península ibérica 5.483 soldados de infantería y 414 de caballería, en Morella a 1.850 soldados de infantería, hacia Tortosa se enviaron otros 1.850 y, por último, 3.430 soldados hacia Alcañiz para unirse a los restos del ejército de Aragón.
Esto sumaba un total de 13.027 soldados para el ejército regular, sin añadir los que ya estaban luchando en el segundo asedio de Zaragoza, los cuales, recogiendo las estimaciones de Vicente Boix, podían oscilar entre 12.000 y 16.000, de los cuales solo regresaron a Valencia unos 1.700.
Luego había que sumar los 11.030 guerrilleros controlados por la Junta de Valencia y los 41.769 milicianos que estaban designados a tareas defensivas.
El total de valencianos que llegaron a luchar en esta guerra fue de 81.000 personas aproximadamente, lo que equivalía a un 10% aproximadamente de la población de todo el Reino de Valencia.
La Junta de Valencia se formó tras la llegada de las noticias de las abdicaciones de Bayona, en las que Carlos IV y Fernando VII cedieron el trono a Napoleón y este se lo dio a su hermano José Bonaparte.
El día 23 de mayo la población valenciana se alzó contra José I teniendo lugar el ´Grito del Palleter´ junto a la Lonja de Valencia, que fue el motivo de la marcha hacia el cuartel general en el viejo palacio real de Valencia en el que el día 25 se formó la junta de defensa del reino.
La Junta tuvo que defenderse de las tropas de Moncey, que asaltaron Valencia el 28 de junio. Pero la defensa fue muy bien organizada por el Conde de la Conquista y Felipe de Saint Marq, por lo que resultó muy desastroso para los franceses. Pese a que no fue una victoria aplastante, los valencianos aprovecharon para enviar misivas a Gran Bretaña para demostrar que las fuerzas españolas podían derrotar a las francesas hasta entonces invictas en Europa.
Estas misivas y la gran victoria española en Bailén convencieron a los británicos para firmar la paz con España y aliarse con ella frente a Francia. La Junta de Valencia, para julio de 1808, ya había conseguido control absoluto del Reino de Valencia, por lo que pasó a enviar tropas para ayudar en otros frentes de la guerra.
Los 16.000 hombres de Saint Marq, que el historiador Vicente Boix comenta que salieron hacia Madrid, fueron los que socorrieron a la heroica Zaragoza rompiendo el cerco y entrando en la ciudad. Esto obligó a los franceses a retirarse por quedarse en inferioridad. Este grupo luchó a finales de 1808 en Tudela, donde los franceses se impusieron y fueron derrotados definitivamente en el segundo asedio de Zaragoza donde casi todos perecieron o fueron hechos presos.
Los valencianos, conscientes del valor moral que tenía Zaragoza, trataron de recuperarla lanzando una ofensiva en Aragón, donde, junto a los restos del ejército de Aragón, consiguieron una sonada victoria en Alcañiz. Pero el sueño se frustro en María de Huerva, a solo 16 kilómetros de Zaragoza, donde el Mariscal Suchet consiguió frenar el avance y comenzó una contraofensiva el 19 de junio de 1809 que derrotó en Belchite de nuevo a las fuerzas valenciano-aragonesas.
A finales de 1810 Suchet cercó la ciudad de Valencia, pero la incesante guerrilla en el norte y la resistencia del sur de Cataluña obligó a Suchet a regresar a Aragón, desde donde comenzó una campaña contra Tortosa donde aun habían tropas valencianas ayudando en la defensa del Ebro. A principios de 1811, Tortosa había caído y la Junta de Valencia apenas tenía tropas regulares para seguir la contienda, por lo que las milicias fueron llenando las filas del ejército regular. No obstante, estas no tenían la disciplina ni la experiencia para enfrentarse a los franceses que llevaban casi una década luchando por toda Europa. La Junta tomó medidas, como la amenaza de expropiar bienes a quienes vendieran suministros a los franceses y la creación, en 1809, de un hospital militar para tratar a los heridos debido a que los reclutas se iban a curar las heridas a sus casas y era muy difícil controlarlos.
Napoleón consideró necesaria la toma de Valencia debido a que, como demuestran el historiador Rafael Zurita y las memorias del Mariscal Emmanuel de Grouchy, Valencia tenía un puerto que permitía comunicaciones con los británicos y era una de las mayores proveedoras de suministros para la guerra.
La ofensiva de Suchet fue demoledora al asediar Sagunto. Joaquín Blake trató de romper el asedio con las últimas fuerzas que le quedaban a la Junta y los refuerzos que las Cortes de Cádiz le habían dado, pero la mayoría eran milicianos inexpertos que aun superiores en número a las fuerzas de Suchet fueron derrotadas y retiradas hacia Valencia a finales de Octubre de 1811.
En Navidades de 1811 Suchet puso asedio a la ciudad de Valencia, que ya no disponía de recursos para defenderse. Capituló en enero de 1812. Los franceses avanzaron más hacia el sur y llegaron hasta Castalla. La campaña fue tan larga y costosa. Además, la retirada de tropas para el frente ruso hizo que los restos de la junta valenciana en Alicante y los refuerzos de Murcia, apoyados por las tropas inglesas de John Murray, consiguieran vencer a Suchet en 1813 y recuperar el territorio valenciano y avanzar hacia Cataluña para expulsar a los franceses de la península. Acción que se conseguiría al año siguiente.