La meritocracia amenaza la ópera de Valencia

¿Puede la burocracia y la meritocracia poner en peligro la existencia misma del Palau de Les Arts?

Así parecen creerlo Plácido Domingo y el dimisionario intendente del coliseo Davide Livermore.

El músico italiano ha decidido dejar su cargo por las rigideces administrativas que le harían tener que pasar por un concurso con los principios de publicidad, mérito y capacidad para cumplir la normativa de contratación del sector público, y que le impiden realizar contrataciones temporales.

Livermore, a quien también le afectarían ciertas incompatibilidades si esas normas se aplicaran de manera estricta, ha asegurado que “cada día hay una traba y se cuestiona la labor del equipo de Les Arts”, al que sólo se le ha respondido en 14 de las 58 solicitudes de contratación de personal. “No voy a ser cómplice si hay un deseo de cerrar Les Arts”, ha rematado.

Previamente había sido convocada una reunión del Patronato del Palau de Les Arts para para “reformular” la cúpula de mando del Palau que podría afectar al futuro de Livermore.

Plácido Domingo, presente en la rueda de prensa de despedida del intendente (junto a decenas de trabajadores que han aplaudido a Livermore a la entrada y la salida del acto), ha calificado la situación de “golpe tremendo a Les Arts”, y la advertido del peligro que corre el palacio operístico si el lugar de Livermore lo ocupa alguien sin experiencia ni formación. Domingo inaugurará la temporada el sábado con “Don Carlo”.

Mónica Oltra, en rueda de prensa previa a la de Livermore pero avisada de sus intenciones, ha asegurado que el problema de Les Arts es que el Gobierno central sólo le da 0'6 millones de euros frente a los 7'1 para el Liceo de Barcelona o los 9'3 para el Teatro Real de Madrid, y que la temporada que ahora comienza está asegurada.

Estas novedades han coincidido con la noticia de que a la antecesora de Livermore, Helga Schmidt, se le va a abrir juicio oral por los presuntos delitos de prevaricación, malversación y falsedad.